La propagación de un nuevo coronavirus podría poner en peligro la celebración de los Juegos Olímpicos de Tokyo de este verano. El director ejecutivo del Comité Organizador, Toshiro Muto, ha mostrado su preocupación por las consecuencias que el virus podría tener para el futuro del certamen deportivo. "Espero que esto se resuelva lo antes posible", ha afirmado, en declaraciones recogidas por Reuters.

Por el momento, el virus originado en la ciudad china de Wuhan ya ha acabado con la vida de medio millar de personas, mientras que el número de infectados supera los 24.600. Representantes del Gobierno japonés, incluyendo al primer ministro Shinzo Abe, han asegurado que desde el país nipón trabajarán duro para que el impacto del coronavirus en los Juegos sea mínimo.

La inquietud en Japón por la infección llega después de que el crucero 'Diamond Princess', con 3.711 personas a bordo, se haya puesto en cuarentena en el puerto japonés de Yokohama, al sur de Tokio, ante posibles casos del nuevo coronavirus chino después de que uno de los pasajeros que desembarcó en Hong Kong el pasado 25 de enero diera positivo.

Los signos comunes de infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre, tos y dificultades para respirar. En casos más graves, la infección puede causar neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e, incluso, la muerte.

En 2003, más de 600 personas murieron en todo el mundo (349 en China) a causa del SARS o síndrome respiratorio agudo, que dejó 5.327 afectados en nueve meses.