La sección primera de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un hombre a 14 años de cárcel por golpear con un martillo a su pareja en su domicilio de El Perellonet y clavarle un destornillador en el pecho. La víctima necesitó 209 días para recuperarse de las heridas.
Así se desprende de la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que el tribunal condena al hombre como autor de un delito de asesinato con alevosía en grado de tentativa con la circunstancia agravante de parentesco y de razones de género, tal y como solicitaba Fiscalía.
Así, le fija 14 años de cárcel, le prohíbe acercarse a la víctima a menos de 500 metros durante 15 años, le fija libertad vigilada durante cinco años tras cumplir la condena de prisión y una indemnización de 35.830 euros para la mujer por las lesiones y el daño moral ocasionado. A la Generalitat Valenciana deberá pagar 38.232 euros por los gastos de asistencia sanitaria.
El incidente se remonta al 12 de julio de 2019, cuando sobre las 18.30 horas llegó el condenado a la casa que compartía con su pareja en una pedanía de El Perellonet, Valencia. Llevaban juntos unos cinco años.
El hombre comenzó entonces a gritarle, le insultó, le recriminó que no trabajaba, que se iba con los hombres de las casas en las que trabajaba y seguidamente se sentó a su lado con un martillo en la mano.
Le recriminó que no hubiera hecho la comida y, a continuación, descargó el martillo con todas sus fuerzas y de manera sorpresiva sobre la cabeza de la mujer, que se encontraba sentada en el sofá. El objetivo era quitarle la vida.
Tras ello, y mientras la mujer gritaba de dolor, el hombre la agarró del cuello y le metió los dedos en la garganta para después coger un destornillador y clavárselo en el pecho "llevado por el mismo propósito de acabar con su vida".
El condenado habría cumplido su objetivo si no hubiera sido por la llegada de varios vecinos que, alertados por los gritos y porque no les abrían pese sus continuas llamadas, tiraron la puerta abajo y abortaron la agresión.
Como consecuencia de los hechos, la víctima sufrió varias lesiones que requirieron tratamiento médico y quirúrgico y que necesitaron 209 días para curar. Tiene como secuelas varias cicatrices que le generan molestias para dormir, además de síndrome de hombro izquierdo doloroso de grado moderado.
El condenado se escuda en que iba "borracho"
Durante el juicio, el condenado se escudó en que el día de los hechos iba "borracho" y reconoció que discutieron y que le golpeó con un martillo porque perdió la cabeza. "Había bebido tres o cuatro litros de coñac. Estaba trabajando en ese momento con el martillo y no recuerdo haberle golpeado con el destornillador", manifestó.
La víctima, por su parte, explicó en la vista que el día en que ocurrió la agresión, tenía pensado echar a su pareja de casa por la bebida. Se pelearon y ella sacó el teléfono para grabarlo y denunciarlo. Entonces, él comenzó a decirle que no trabajaba y que se iba con otros hombres y le golpeó con el martillo en la cabeza, describió. La Audiencia da veracidad a su versión, corroborada por los vecinos, y condena al acusado a 14 años de prisión.
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