Cuando Florentino Pérez regresó a la presidencia del Real Madrid en el año 2009 lo hizo con la idea de agitar el mundo del fútbol. Por aquel entonces el club blanco estaba atravesando un periodo complicado, después del escándalo que provocó la dimisión de Ramón Calderón y la llegada -temporal- de Vicente Boluda al cargo. Enfrente, el Barça acababa de ganar un sextete histórico. Había que dar un golpe en el tablero.

Dicho y hecho. Los 258 millones que el presidente puso sobre la mesa ese verano sirvieron para firmar, entre otros, a Cristiano Ronaldo, Kaká y Karim Benzema, tres jugadores de nivel Balón de Oro. Pero los planes de Florentino iban mucho más allá de lo puramente deportivo. Por eso empezó a gestar una idea que acabaría viendo la luz muchos años después: el nuevo Bernabéu.

Durante los siguientes años el club blanco comenzó a perfilar un proyecto que acabó siendo el doble de costoso de lo previsto. Para financiar la faraónica obra tuvieron que pedir créditos por valor de 1.160 millones, que con los intereses se dispararon, según han apuntado diversos medios, hasta los 1.500 'kilos' de coste. Pero dio igual, porque sabían que el nuevo estadio sería una máquina de hacer dinero. Gracias, en gran parte, a los eventos de todo tipo que el coliseo blanco acogería. Ahí entraban los conciertos. Ya se han celebrado varios, pero el miércoles y el jueves de esta misma semana actuará allí Taylor Swift. Y eso es un salto de nivel, porque no es exagerado decir que es la artista del momento.

En la capital ha cundido la locura con la artista estadounidense, que ha vendido más de 100.000 entradas para sus únicos dos conciertos en nuestro país. Pero hay un grupo de madrileños que no la están esperando con ilusión, los que forman parte de la Asociación Vecinal de Perjudicados por el Bernabéu. "Creamos la asociación hace dos años, cuando sacaron el concurso público para construir los dos párkings y el túnel del nuevo Bernabéu, que considerábamos que eran ilegales. Precisamente el pasado viernes salió la sentencia, en la que el juez nos ha dado la razón y ha condenado a pagar las costas al Ayuntamiento", explica Lola Flores, portavoz de la plataforma.

No obstante, Flores admite que los problemas ocasionados por los nuevos usos del Bernabéu no se los vieron venir: "Cuando empezaron los conciertos nos dimos cuenta. Una cosa son los partidos de fútbol cada 15 días. Pero otra es no poder vivir en nuestras casas. Estamos horrorizados con lo que se nos viene encima. Ahora a ver qué pasa en este concierto -el de Swift- y los 18 que nos quedan hasta julio".

La asociación la conforman unas 1.200 familias de 40 comunidades de vecinos, lo que nos da un total de 5.000 personas afectadas, según las cuentas de Flores. "Los niños y los mayores son los que más están sufriendo. Están cambiando toda la circulación del barrio, estamos como en una jaula. Y en casa no se puede estar por el ruido, nos tiemblan hasta los cristales y al día siguiente tenemos que ir a trabajar, y los niños al colegio. Ha habido fines de semana con conciertos durante tres días seguidos, y algunos acaban a la una de la mañana. Y luego encima tiene que venir los servicios de limpieza, porque lo ensucian todo. Esto es una zona residencial, no es un sitio para estar haciendo todos días haciendo eventos", recalca.

Ildefonso Trigueros, director general del colegio San Agustín, ubicado a 100 metros del estadio, también puede hablar en persona de cómo les está afectando: "Esta semana los alumnos se secundaria empiezan los exámenes el jueves. Y los estudiantes de segundo de bachillerato están preparándose la EvAU. Durante las obras ya hemos soportado bastantes ruidos y molestias. Pero bueno, todo el mundo tiene derecho a arreglar su edificio. Pero este follón de los conciertos es bastante molesto. No pensábamos que fuera a ser tanto".

No son los únicos. Cerca de allí también están el colegio María Virgen y el Sagrado Corazón. Entre los tres, Trigueros estima que suman cerca de 5.000 alumnos. "Nos han dicho que nadie tendrá problemas para acceder al colegio. Pero si seguimos así con los conciertos va a ser un horror. Las pruebas de sonido, que se hacen los días anteriores, nos pillan en clase. Y tenemos que decidir entre cerrar las ventanas y asarnos o abrirlas y escuchar la música. Por eso nos asustamos bastante cuando nos enteramos de que venía Taylor", desliza.

"Están incumpliendo la normativa de ruido"

El pasado 18 de mayo se celebró uno de estos grandes conciertos para celebrar el centenario de Telefónica. Como cabeza de cartel actuaron  Alejandro Sanz, Ana Mena y Hombres G. Y los vecinos, hartos, no dejaron de llamar al la Policía Municipal para quejase. "Los agentes vinieron y midieron los decibelios, que estaban entre 80 o 90 cuando la legislación dice que no pueden sobrepasarse los 40 o, de manera excepcional, los 50. Están incumpliendo la normativa de ruidos y la ordenanza municipal, pero los policías solo nos dijeron que les abrirían un expediente sancionador que, como mucho, supondría una multa para el promotor. Pero les compensa pagarla, claro", resume Flores.

"Si el Ayuntamiento no pone medidas para insonorizar el estadio estamos estudiando tomar medidas. Creo que el Bernabéu no estaba pensado para esto, pero ningún país de Europa tiene vecinos conviviendo en pleno centro de la ciudad con conciertos a tope. Con los parkings el juez nos ha dado la razón, y con esto vamos a ir a la justicia española y europea con todas las consecuencias. Hay que cumplir la ley, porque esto es un atropello. Pero hemos intentado hablar con el Ayuntamiento por activa y por pasiva, y ni caso", zanja la portavoz.