¿Qué está pasando con los coches eléctricos? La oferta de modelos de las marcas tradicionales es cada vez más amplia, y la llegada de nuevas marcas, sobre todo chinas, amplía todavía más esta oferta.

Los precios de los eléctricos, se supone, bajarán más en los próximos años y, aunque de muy poco a poco, las infraestructuras de recarga crecen y están claramente por encima de la demanda de recarga en viaje, al menos en España. Pero ni con todo ello siguen de ser del convencimiento de muchos conductores.

Y es que no es menos cierto que los coches eléctricos siguen teniendo los mismos problemas que hace unos años: precio elevado si los seguimos comparando con respecto a los de combustión, y con fallos que, a día de hoy, continúan sin solucionarse, tampoco en los de más alta gama.

Sí que es verdad que con su autonomía se han hecho importantes progresos, pues cada vez más abundan los modelos que autorizan tiradas de entre 450 y 600 km reales. Aún así, y a pesar de toda su tecnología, los coches eléctricos mantienen fallos en sistemas como la recarga o la batería.

Los fallos de los coches eléctricos son menos comunes, pero no desparecen

Con todo, se considera que los fallos en coches eléctricos son menos comunes que los que suceden en los vehículos de gasolina o diésel, ya que tienen menos piezas sometidas a desgaste.

Los expertos mantienen que estos coches tienen entre un 30 y 50% menos de problemas, pero muchos de ellos no son ni por ese desgaste, sino porque todavía no hay una cometida lo suficientemente importante como para arreglar complicaciones que se hacen, en muchos casos, muy difíciles de gestionar para los propietarios de estos vehículos. Un caso concreto se da en la batería de arranque.

La batería de arranque de los coches eléctricos todavía no ha sido perfeccionada

Uno de los dos primeros componentes que suelen dar muchos quebraderos de cabeza son las baterías de arranque de los coches eléctricos. Entre las principales causas de avería está la llamada 'descarga profunda', o lo que es lo mismo; que la batería de arranque necesite más energía de la que tiene disponible en función de su capacidad.

También ocurre si la batería no se recarga correctamente, por ejemplo, porque el vehículo se queda sin corriente durante un periodo prolongado, o la batería de 12V no se carga lo suficiente con la batería de alta tensión durante un ciclo de conducción.

Los coches eléctricos están lejos de ser garantía para muchos conductores
Los coches eléctricos están lejos de ser garantía para muchos conductores | Pexels

Al respecto, lo que sabemos de ellos es que su reemplazo (o arreglo, si hay suerte) no es precisamente barato. Según la información disponible, el reemplazo de la batería de un Tesla puede oscilar entre los 7.000 y los 25.000 euros, dependiendo del modelo y la capacidad de la batería.

Para maximizar la durabilidad y el rendimiento de las baterías en los coches eléctricos, es importante tener en cuenta algunas consideraciones adicionales:

  • Sigue las recomendaciones del fabricante en cuanto al cuidado y mantenimiento de la batería, como evitar cargas y descargas extremas y el vehículo en condiciones óptimas.
  • Utiliza puntos de carga confiables y seguros para evitar posibles problemas que puedan afectar a la batería.
  • Las temperaturas extremas (frío o calor) pueden afectar el rendimiento y la vida útil de la batería. Procura evitar exponer el coche eléctrico a temperaturas muy altas o muy bajas durante períodos prolongados.

Las baterías son una parte esencial de los coches eléctricos y entienden los costes y la durabilidad asociados con ellas son fundamentales. A medida que la tecnología avanza se espera que los costes de las baterías disminuyan y la durabilidad mejore, lo que hace que los coches eléctricos sean una opción cada vez más atractiva y sostenible en el futuro.

Los fallos de carga, la avería más frecuente de los coches eléctricos

Los coches EV, los 100% eléctricos, funcionan gracias a un motor eléctrico que es alimentado a través de una batería. Cuando esa batería se descarga, el usuario conecta el coche a una toma de pared para volver a cargarla. Sin embargo, es relativamente común que haya fallos en la carga por diferentes motivos:

  • El pin del conector que está destinado a comunicar la estación de carga con el coche puede estar doblado o tener algún tipo de fallo. Si esto sucede, no hay comunicación entre ambos dispositivos y, por tanto, la carga no se inicia.
  • El punto de carga está en mal estado. Puede ocurrir que vayas a cargar tu coche a un punto de carga público o privado y que la carga se interrumpa y no puedas desconectar el cable. En ese caso, Ariza recomienda buscar el diferencial que debe tener el punto de carga (como el que tienes cuando se produce un cortocircuito en tu casa) y desconectarlo. Ahí ya podrás desconectar el conector y volver a subir el diferencial. No vuelvas a conectar tu cable ahí y llama al técnico del punto de carga para que tenga constancia de que hay una avería.

El software y la electrónica, entre lo más negativo

Además, muchos de sus problemas están relacionados con el software y la electrónica, siendo los fallos en los sistemas de infoentretenimiento, la conectividad y las ayudas a la conducción los que más denuncian los propietarios.

Un factor crucial que se suele apuntar es la brecha entre las expectativas y la realidad del comprador de coche eléctrico. Los que optan por este tipo de vehículo esperan una experiencia de conducción superior y lo último en tecnología. Sin embargo, los problemas técnicos y de software están socavando estas expectativas, resultando en una percepción negativa de la calidad inicial de estos vehículos..

Es importante que realicemos el mantenimiento regular del coche eléctrico según las recomendaciones del fabricante. Esto ayudará a prevenir averías y a alargar la vida útil del vehículo. Además, es recomendable que contrates un seguro que incluya asistencia en carretera para que puedas estar tranquilo en caso de que tengas algún problema con tu coche.