Si no recoges los excrementos de sus perros en la calle puede resultarles muy caro, ya que con la entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal, la sanción económica llega a ser regulada a escala nacional y puede llegar a ser de hasta 10.000 euros, además de que un número de ayuntamientos están poniendo en marcha sistemas de vigilancia que tanto premian a las personas como que puedan contener su identidad.

Las sanciones por excrementos de perro

La cuantía de la multa que se podría ver condenada una persona por no recoger las defecaciones de su perro previo a la Ley de Bienestar Animal era muy dispar de un municipio a otro. Había municipios que imponían una sanción de solo 60 euros, y otros, que imponían una multa que podía llegar hasta los 3.000 euros. A la hora de redactar la ley se opta por establecer un marco común en toda España.

Conforme a lo establecido por el artículo 26 de la misma normativa, son responsabilidad de los dueños de perros evitar que sus animales realicen las necesidades fisiológicas en las zonas de paso, fachadas o puertas de los locales. En el caso de que llegue a producirse, deberá recogerse el excremento y limpiarse el espacio con productos biodegradables. En relación con la infracción se establece, por el hecho de no respetar la obligación de impedirlo, que la misma se adecue a la consideración de leve y quede sujeta a una sanción pecuniaria de entre 500 y 10.000 euros dependiendo de la valoración que se asigne a la infracción.

También debes limpiar los orines de tu perro

Además de los excrementos, según la ley, la responsabilidad de evitar que su perro orine en un lugar por donde frecuentemente pasan los transeúntes es de los propietarios de los perros. En el caso de orinar donde no deben, tienen que limpiar la parte orinado con productos biodegradables para eliminar cualquier resto que impida igualmente la proliferación de malos olores, así como también para mantener en buenas condiciones el mobiliario urbano. No cumplir con la obligación de evitar que orinen puede conllevar multas económicas.

El ADN canino: la clave para identificar a los infractores

Como medida para que los dueños de perros no ignoren la legislación, más de 80 ayuntamientos de España ya han puesto en marcha una iniciativa de identificación por ADN. Así se crea una base de datos compuesto por muestras de saliva de los perros que se han censado en cada municipio. Cuando la policía local halla excrementos caninos en la vía pública, se toma una muestra y se remite a un laboratorio, donde se procede a la identificación del perro y, por tanto, de su propietario.

El sistema ha sido ya adoptado en localidades como Málaga, Alcalá de Henares, algunas localidades de Cataluña y de la Comunidad Valenciana. Esta tecnología permite a los municipios multar a sus propietarios sin tener que pillarlos in fraganti.

Multas más efectivas y calles más limpias

Uno de los principales inconvenientes a la hora de sancionar a los infractores era la dificultad de identificar a los infractores en acto de infracción, pero el análisis del ADN ha transformado la situación, ya que, como indican desde la empresa responsable del sistema, ADN Canino, hay más de 150.000 perros registrados y más de 1.100 sanciones se han dictado en los municipios donde el sistema está implantado.

Las cuentas son bien claras: cada análisis de heces tiene un coste inferior a 40 euros, a la vez que las multas superan los 300 euros, dependiendo del municipio. Con esta medida las ciudades sacan financiación del sistema y eliminan una cantidad significativa de heces presentes en la calle.

Consejos para evitar sanciones y mantener la convivencia

Lleva siempre bolsas y productos de limpieza

Con la finalidad de esquivar sanciones de los cuerpos de seguridad o de los servicios públicos, así como para participar en el bienestar de la comunidad que nos rodea, recuerda que debes pasear con bolsas para recoger los excrementos de tu perro. Además, sería conveniente que también llevaras una botellita con agua y vinagre u otro producto biodegradable que te ayude en la limpieza de la orina.

Ya sea por civismo o por evitar multas, recoger los excrementos de tu perro y limpiar sus orinas es una obligación ineludible. La nueva Ley de Protección Animal y los sistemas de identificación están ayudando a que cada vez más ciudades consigan mantener limpias sus calles y favorecer la convivencia entre ciudadanos y mascotas.