Semana Santa es sinónimo de vacaciones, procesiones y torrijas. Desde hace días ya vemos en bares, cafeterías, obradores y supermercados ofertas para comprar torrijas. Nadie puede resistirse a tomar el dulce típico de la Semana Santa.

Las cadenas de supermercados se adaptan a los tiempos y fechas en las que vivimos y Mercadona vuelve en esta Semana Santa con un producto estrella, un alimento que en estas fechas señaladas no puede faltar en las casas de los ciudadanos españoles.

Hablamos de las torrijas, un plato típico que Mercadona ha adaptado y tiene en venta por segundo año consecutivo a un precio irresistible y con el valor añadido del éxito logrado en 2023.

Ofrecer novedades en forma de alimentos, coincidiendo con las fiestas que se celebran a lo largo del año en España es un clásico últimamente en la propuesta de Mercadona.

Las torrijas son el dulce típico de Semana Santa
Las torrijas son el dulce típico de Semana Santa

La cadena de supermercados de origen valenciano comenzó con los típicos polvorones, turrones y otros dulces de Navidad, y pasó también a hacer dulces especiales por Halloween. En 2023, optaron también por crear sus propias torrijas de cara a Semana Santa y este plato típico se repite en 2024 con una leve subida de precio, pero aún a una cantidad muy competitiva que invita a probarlas en estas fechas.

Así son las torrijas de Mercadona

Lo primero que debemos delimitar y dar a conocer, es que las torrijas que están a la venta en Mercadona son torrijas fritas congeladas, algo que hace más sencillo su ingesta en cualquier momento de la Semana Santa y podrás comerlas cuando te apetezca o te puedas permitir un capricho en tu dieta.

En el envase de cartón que podemos comprar en Mercadona, está disponible una bandeja de 4 torrijas congeladas por un precio de seis euros. En 2023 teníamos esta misma oferta a 5,50 euros, pero año después se da una subida moderada y considerable teniendo en cuenta que ya no estamos en periodo de prueba con este producto.
Los ingredientes de estas torrijas congeladas son: pan, leche entera, canela, huevo líquido pasteurizado, aceite de girasol, azúcar además de conservantes y aromatizantes de naranja y limón.

Cada torrija tiene un peso de 100 g, aproximadamente, lo que hace que el tamaño del producto total sea considerable y para compartir entre varios comensales. Las torrijas de Mercadona vienen ya fritas para que solo tengas que descongelarlas para comerlas.

Las torrijas son de la empresa Mercapastry, especializada en la fabricación de productos frescos de panadería y pastelería, con sede en Madrid, y la recomendación para ingerir las torrijas de Mercadona es sacarlas del congelador con nueve horas de antelación para que la apta temperatura sea natural y no forzada.

Cómo consumir las torrijas de Mercadona

Las torrijas congeladas del supermercado valenciano son ideales para meriendas pero hay que tener en cuenta que se deben sacar con 9 horas de antelación del congelador, tal y como indican las instrucciones del producto. Para su perfecta conservación no se debe volver a congelar. Una vez descongeladas hay que consumirlas en cuatro días y siempre guardado en la nevera.

El origen de las torrijas y su relación con Semana Santa

Las torrijas son un dulce tradicional que se puede comer durante todo el año, siempre con moderación debido a la gran cantidad de azúcar y grasa que contiene, pero que es habitual durante la Cuaresma y la Semana Santa. Pese a ser un alimento que se ingiere en la actualidad, el origen de las torrijas fritas está en finales del Siglo XVI, lo que le convierte en uno de los postres tradicionales de España de mayor antigüedad. 

Siempre atentos a este tipo de demandas, Mercadona es la cadena de supermercados española que más atenta ha estado a la hora de elaborar este postre casero, con denominación propia y un resultado muy positivo, hasta el punto de repetir la campaña de 2023 en la Semana Santa de 2024 y lanzarse así de nuevo a la venta de las torrijas

¿Cómo resistirse a una torrijas? Sean de supermercado, de repostería o hechas por nosotros es imposible. Además, las hay de vino, de chocolate, de horchata, veganas y hasta "light".