Carlos Alcaraz ha derrotado al noruego Casper Ruud por 7-5 y 6-4 en la final del Masters 1000 de Miami para conquistar el título más importante de su carrera y convertirse, de paso, en el campeón más joven de la historia del torneo.
Con apenas 18 años y 333 días, Alcaraz sigue así los pasos de algunos de los mejores tenistas de siempre. Talentos precoces, campeones con acné. Como aquel Novak Djokovic campeón en Miami con 19 años. Como el Rafael Nadal que se coronó en Montecarlo en 2005 con 18. Aunque dicen que las comparaciones son odiosas y hay muchas voces pidiendo que no se cargue a Alcaraz con la pesada losa del nuevo Nadal, lo cierto es que el murciano da cada día más razones. Va a tener muchos domingos a media España delante del televisor.
"Muchas felicidades Carlitos por tu triunfo HISTÓRICO en Miami. El primero de tantos que van a venir, seguro", fue el mensaje que publicó Nadal en Twitter nada más acabar el partido. Palabras mayores.
Una remontada que vale oro
Este domingo le costó unos minutos carburar. Empezó 3-0 abajo, pero una vez encontró el ritmo, ya no paró. Le endosó un parcial 10-2 en juegos para llevarse el primer set por 7-5 en una hora y con el tenis que acostumbra: directo, a tumba abierta y deslumbrante, de ese que levanta a los espectadores de los asientos con puntos estratosféricos.
En el segundo set se despegó enseguida con un 3-0 y a los pocos minutos -después de que Ruud pidiera la asistencia médica por problemas en la cadera- estaba celebrando el título en el suelo de la pista y con las manos en la cabeza.
Con su triunfo de hoy, supera a Djokovic como el campeón más joven de la historia de Miami. El serbio ganó en 2007 el primero de sus 37 Masters 1000 con 19 años y diez meses. Alcaraz, que entonces era un niño de tres años, se ha convertido además en el tercer tenista más joven en levantar un Masters 1000, solo por detrás de Michael Chang y el propio Nadal. El lunes aparecerá en el puesto 11 del ranking ATP, la mejor clasificación de su carrera, y se va de Florida con un cheque de 1,2 millones de dólares.
"Estoy sin palabras ahora, no puedo describir mis sentimientos. Es muy especial ganar aquí en Miami mi Masters 1000", ha dicho Alcaraz en sus primeras palabras nada más acabar el partido. "Me hace muy feliz además que esté aquí mi padre, es el segundo torneo ATP al que me acompaña".
El primer español campeón en Miami
Alcaraz ha derribado además un muro infranqueable para el tenis masculino español. Hasta hoy, las ocho finales que han disputado españoles en Florida terminaron en derrota. Nadal perdió cinco finales, una Sergi Bruguera (1997), otra Carlos Moyá (2003) y una más David Ferrer (2013). En categoría femenina sí hay títulos para España, los dos que logró Arantxa Sánchez Vicario en 1992 y 1993.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero llega a la temporada de tierra batida en una nube. Desde enero ha sumado ya 18 triunfos -por solo dos derrotas- y dos títulos, el de Río de Janeiro y ahora el de Miami. Nadal es el único tenista que lleva más victorias en lo que va de curso (20).
Ferrero, su técnico, llegó a ser número uno del mundo pese a que nunca pisó la final de Miami. Hoy vivió un día lleno de emoción: pocos días antes del inicio del torneo falleció su padre y tuvo que volar a España. Hoy fue la primera persona a la que abrazó Alcaraz, con los dos entre lágrimas, en el palco del estadio.
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