Las muertes de los trabajadores inmigrantes, la poca libertad de prensa y la falta de derechos de las mujeres y de la comunidad LGTBI, entre otras polémicas, ensombrecieron desde el principio la elección de Qatar para acoger uno de los eventos más importantes que pueden celebrarse, como es el Mundial. La gran mayoría del mundo del fútbol optó desde el principio por guardar silencio, mientras unos pocos, como Xavi, sostuvieron que era una buena oportunidad para demostrar que el país del Golfo Pérsico estaba recibiendo “críticas injustas”, y otros llamaban a boicotear un torneo que calificaban como “sucio” o “comprado”. Un debate que para el espectador de a pie no existió cuando el balón echó a rodar.

Según la consultoría Barlovento, la final entre Argentina y Francia tuvo 17.076.000 de espectadores de audiencia acumulada en España (personas que han visto al menos un minuto de la emisión). De media, los primeros 90 minutos fueron seguidos por 9.774.000 de espectadores, lo que supone una cuota de pantalla del 62.2% entre las dos cadenas que lo retransmitieron: La 1 y Gol Mundial. A medida que los minutos iban pasando y la emoción aumentaba, cada vez más españoles sintonizaban el partido. En la prórroga hubo 11.994.000 de espectadores de media (70.9% de cuota), y los penaltis tuvieron 13.005.000 de espectadores y un 74.3% de cuota de pantalla.

Barlovento realiza informes sobre la audiencia de los mundiales desde 1994, año en que Brasil venció a Francia en los penaltis para ganar el cuarto de sus cinco mundiales actuales. Según sus datos, los penaltis del Argentina - Francia fueron lo más visto en una final desde el Países Bajos - España de 2010. Aquel partido fue visto por 13.933.000 de espectadores de media, que subieron hasta los 15.605.000 durante la prórroga en la que nuestro país se consagró, por primera y única vez en su historia, campeón del mundo.

Análisis global del Mundial

En total, durante el mes de competición que duró, el Mundial tuvo 34.190.000 de espectadores únicos españoles, lo que significa que tres de cada cuatro españoles sintonizaron en algún momento cualquiera de los 64 partidos que hubo (en concreto, el 74,7 % de la población). En La 1, el promedio en cuota fue del 37,7 % y 5.082.000 espectadores, mientras que Gol Mundial alcanzó el 4,0% y los 435.000 de espectadores.

Los partidos de España tuvieron en total 27.585.000 de espectadores únicos (60,3 % de la población), con una audiencia media de 10.237.000. Las comunidades con la cuota de pantalla más alta fueron La Rioja (78,6%), Cantabria (73,6%) y Castilla y León (68,1%), mientras que las tres que menos registraron fueron el País Vasco (53,9%), Cataluña (54,6%) y Galicia (60,0%).