La Policía Local de Santander ha detenido a un padre y a su hijo, de 45 y 22 años, por agredir a los agentes que iban a identificarles por consumo de sustancias estupefacientes en la vía pública, lanzándoles un puñetazo y una patada y ordenando a un perro mastín que les atacara.

Según han informado este viernes fuentes policiales, los hechos tuvieron lugar ayer por la tarde en la calle Colombia, donde los agentes observaron a tres personas en el exterior de un club cannábico y cómo una de ellas, al percatarse de su presencia, tiraba un cigarro al suelo, sospechando que contenía marihuana.

Por este motivo, le pidieron la documentación para formular denuncia administrativa por consumo de sustancias estupefacientes en la calle. A continuación, y ante la sospecha de que los otros llevasen también droga, los agentes pidieron a uno de ellos que se identificase y permitiera la inspección de la mochila que llevaba.

Cuando el policía iba a comprobarlo, el hombre lo impidió y reaccionó de forma violenta, lanzándole un puñetazo en la cara, por lo que se procedió a su detención, a la que opuso una fuerte resistencia.

En ese momento, su hijo lanzó una patada a la espalda del agente que estaba forcejando con su padre para intentar impedir la detención, a la vez que ordenó atacar a los agentes a un perro mastín que salió del local, por lo que también fue detenido.

La Policía instruyó diligencias judiciales contra ambos por dos supuestos delitos de atentado a agente de la autoridad. Dos de los policías que participaron en la intervención tuvieron que acudir a un centro sanitario para ser asistidos de las lesiones derivadas de la intervención.