Emily Vaquero Palii, una niña de dos años de Zaragoza, lleva desaparecida desde el pasado viernes 19 de mayo. La plataforma SOS Desaparecidos Aragón ha activado la alerta bajo la sospecha de sustracción parental.
La pequeña niña desaparecida en Zaragoza es hija de un padre español y una madre ucraniana, a quien se le sospecha como responsable del secuestro. Con casi un metro de estatura, Emily tiene el pelo rubio y liso, con media melena, y los ojos entre marrones y gris claro.
Asimismo, la plataforma también ha publicado una fotografía de la madre, Iryna Palii, de 34 años de edad para así facilitar la búsqueda de la pequeña. Sin embargo, las autoridades sospechan que las dos han podido abandonar el país.
El día de la desaparición de Emily en Zaragoza
El día de la desaparición de la pequeña Emily empezó como otro cualquiera. Hacía buen tiempo por lo que el padre de la niña, Alejandro Vaquero, la llevó al parque tras recogerla en la guardería sobre las 15.30.
Sobre las 17 horas, vino la madre de la menor para llevarla a una fiesta de cumpleaños. Un hecho que ya le pareció sospechoso a Alejandro porque era la primera vez que escuchaba de ello.
Al volver a casa después de trabajar, se confirmaron sus sospechas. No había ni rastro de ambas. Asimismo, también faltaban algunas de sus pertenencias personales como los cepillos de dientes y la maleta. Tras los intentos fallidos de contactar con Iryna, el padre denunció la desaparición de Emily.
"En estos momentos, mi mujer puede subirse a un avión con mi hija y nadie puede poner ninguna traba", ha señalado Alejandro a Heraldo. Ahora mismo es la mayor preocupación del padre. Una sospecha que comparten los investigadores.
La pequeña niña desaparecida en Zaragoza dispone de una triple nacionalidad (española, ucraniana y estadounidense) lo que podría solicitar su salida del país. Aunque Alejandro asegura que la madre de Emily “no tiene un lugar obvio al que pudiera haber ido fuera del país”.
Un matrimonio a punto de romperse
Iryna y Alejandro se han conocido hace más de diez años. Aunque asegura que la llegada de Emily era una “alegría” para ambos, su relación se ha desgastado con el paso del tiempo.
Actualmente la pareja se encontraba en trámites de divorcio. Sin embargo, el padre no ha tenido tiempo para formalizar la custodia de la pequeña como consecuencia de la huelga en los juzgados.
Tras contactar con su abogada, Alejandro ha solicitado el cierre de fronteras para ambas. “Solo espero que la rapidez con la que se tramitó la denuncia le impida llevar a cabo sus planes, sean los que sean", ha explicado a Heraldo.
Debido a la guerra de Ucrania, el padre de la desaparecida Emily sospecha que en caso de haber salido de España, la madre y la hija han podido buscar en Rusia. Sin embargo, confía en el trabajo de los agentes de policía para localizar a la pequeña.
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