La Policía Nacional ha desarticulado una banda criminal que traía a España perros hacinados de Europa del Este para venderlos ilegalmente. La organización criminal retenía a más de un centenar de animales. Además, durante la operación se han encontrado restos óseos de otros que habían sido sometidos a la eutanasia.

Los agentes han detenido a ocho personas localizadas en las provincias de Madrid y Girona como presuntos responsables de delitos de maltrato animal continuado, estafa, intrusismo profesional, falsificación documental y pertenencia a organización criminal.

La banda seguía una estructura piramidal con dos líderes principales, lo que permitió al grupo especializado en la lucha de delitos contra el medio ambiente de la Policía realizar una estrecha vigilancia.

Los animales eran importados desde países de Europa del Este como Eslovaquia o Hungría. El transporte de los mismos se realizaba por carretera en trayectos de más de quince horas en los que los cachorros viajaban hacinados. Una vez en España, donde eran repartidos en establecimientos de Madrid y Cataluña, se procedía a su venta a través de documentación falsificada.

Tal y como ha comunicado la Policía, las cartillas correspondientes a los animales eran manipuladas para modificar la edad real de los cachorros, su raza o para ocultar a los compradores las enfermedades que algunos padecían. No solía informarse tampoco a los del origen de los cachorros.

Una veterinaria de confianza era la encargada de sellar las cartillas, dando así un aspecto legal a los documentos. La organización ofertaba los animales a través de una web creada para este fin y mediante plataformas de comercio electrónico.

En los últimos seis meses la Policía Nacional ha rescatado más de medio millar de animales en distintas operaciones de este tipo llevadas a cabo en toda España.