Dos cadáveres momificados han sido hallados en una vivienda de la urbanización Santa Margarida de Roses, en Girona, sin que presenten indicios de violencia y con posibilidad de que falleciesen en 2018, según las averiguaciones sobre el tiempo que hace que nadie veía a esas personas.

Según fuentes de la investigación, las averiguaciones comenzaron con la alerta de una vecina a la Policía Local el pasado 3 de abril, porque sospechaba que algo podía hacer ocurrido a una madre y a su hijo, de unos 80 y 60 años, aproximadamente, a los que conocía y de los que hacia mucho tiempo que no tenía noticias.

Tras poner el caso en conocimiento de los Mossos d'Esquadra, los agentes visitaron la casa, donde encontraron la cerradura forzada y los dos cuerpos en el interior.

Los cadáveres de madre e hijo, ambos de nacionalidad española, fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Girona para determinar las causas de la muerte.