El artista canadiense The Weeknd brilló en el espectáculo de descanso de la Super Bowl, la final de fútbol americano de Estados Unidos, con un impactante espectáculo que, por primera vez, no se desarrolló desde el campo de juego. Tras los primeros dos tiempos del partido entre los Kansas City Chiefs y los Tampa Bay Buccaneers se abrió paso The Weeknd, vestido con una chaqueta roja de lentejuelas sobre un atuendo monocromático en negro.
Después de interpretar «House of Balloons», acompañado de un coro con uniformes de robot postapocalíptico, el artista siguió desde un laberinto de espejos con «Can't Feel My Face», «Feel It Coming» y «Save Your Tears» que ha provocado el meme más compartido de la noche en Twitter.
Después fue el turno de «Earn It», el tema de la película «Cincuenta sombras de Grey», que cantó acompañado de una orquesta en vivo y delante de asientos iluminados de tal forma que daban la sensación de ser edificios que luego se transformaron en la silueta de un cementerio. Finalmente el artista cerró el espectáculo con «Blinding Lights».
A diferencia de la espectacular actuación de Jennifer López y Shakira del año pasado, The Weeknd apostó por un espectáculo más sobrio y totalmente audiovisual pagada con siete millones de dólares de su propio bolsillo.
La parte artística del Super Bowl había comenzado horas antes con un concierto de Miley Cyrus en las afueras del estadio, que fue transmitido en vivo por TikTok.
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