Esta semana los premios cinematográficos y la alfombra roja de los Goya 2022 están en boca de todos. Los Oscar por la simultánea nominación de Javier Bardem y Penélope Cruz, además de las de dos artistas con grandes trabajos como Alberto Iglesias y Alberto Mielgo y los Goya por su celebración este próximo sábado 12 de febrero, envueltos en una gala cargada de talento, arte y dedicación, después de las dos singulares galas anteriores debido a la pandemia. 35 entregas originales, creativas y diferentes en cada una de ellas, dejando recuerdos perpetuos en la memoria española. El rap de Resines, el error de Adriana Ugarte o los tacones rojos al estilo Mago de Oz de Dani Rovira quedarán reflejados para siempre en la televisión, en la hemeroteca y ahora entre estas letras.

La gala de los Premios Goya vuelve, y lo hace por todo lo alto. Después de la entrega de galardones con celebraciones desde el sofá de sus casas, a través de videollamadas, y con el plató vacío, este año regresa más fuerte que nunca y los premios podrán gozar de su característico público dando vida a esta cita anual, no sin antes recordar los diez momentos históricos que han pasado por la gala de los Goya.

La felicitación de Almodóvar a Felipe VI (2000)

Pedro Almodóvar, experto en marcar recuerdos en la memoria de los Goya. Todo empezó en el año 2000 cuando protagonizando la gala gracias al peculiar 'Cumpleaños feliz' que cantó dirigido a Felipe VI -entonces Príncipe de Asturias- por su 32 cumpleaños provocando las risas hasta del propio Rey, dedicándole además su Goya por Todo sobre mi madre. "No sé como llamarle, como eres tan joven..." o "si yo fuera un poco más no sé qué, como Marilyn, le cantaría el 'cumpleaños feliz', pero no me atrevo" fueron algunas de las perlas que soltó en aquella gala.

Después de esta, vendrían los Goya de 2005, un trago amargo para el director manchego y para su hermano, Agustín Almodóvar, debido a su enfado por el trato de la Academia a Hable con ella, lo que desencadenó una despedida a la francesa y sin un solo 'cabezón'. Al año siguiente anunciaban su retirada, alcanzando hasta seis años sin aparecer en las galas, ni si quiera para recoger su Goya a Mejor Director por Volver en 2007.

"No a la guerra" (Gala de los Goya 2003)

Con España recién embarcada en la Guerra de Irak -por decisión del entonces presidente José María Aznar-, la Academia encargó el montaje escénico de aquella gala del 2003 a Animalario, compañía teatral dirigida en ese momento por Alberto San Juan y Guillermo Toledo, equivalente de una hipotética gala de los Oscar dirigida ese mismo año por Sean Penn y Michael Moore.

Con todo esto, muchos de los galardonados pronunciaron un emotivo discurso con claras ideas negacionistas hacia la guerra. Entre ellos destacaron Manuel Alexandre, ganador del Goya de Honor, quien además había luchado en la Guerra Civil y se acordaba de lo que supone estar en el frente, y Javier Bardem con su “no a la guerra”.

Ese año quedó presente en el imaginario colectivo de los españoles, indiferentemente de las ideologías de cada uno. Hay quien considera que esa fue la noche en las que los de derechas confirmaron sus sospechas de la ideología cinematográfica, diferente a las suya.

El realizador se equivoca de Bayona (2008)

Aquel año 2008 El Orfanato fue multipremiada con cinco Goyas en las categorías técnicas pero también al Mejor Guion y Director Revelación. Esta última estatuilla fue concedida a Juan Antonio Bayona, quien además sería ganador de dos Goya más -Un monstruo viene a verme (2016), Lo Imposible (2012)-. Director acompañado en ese momento junto a su hermano gemelo, Carlos.

En el momento de ponerle cara a la persona detrás de la dirección de la película, el cámara o realizador, vio mejor idea enfocar a Carlos que a Juan Antonio, un error cómico que hizo cambiar de asiento al -verdadero- ganador del premio.

Los besos de Carmen Machi (2009)

Noche de pasión para Carmen Machi, José Coronado y Santi Millán. Un amor sin barreras que se dio a conocer con el “¿preparada?” de José Coronado antes de darle un caluroso morreo a Machi como saludo previo a la presentación del Goya a Mejor Actor de Reparto. Carmen repitió la jugada con Santi Millán, el tercero en discordia. Pero lo más inesperado fue que Coronado y Millán fueron dignos protagonistas de ese reparto de besos entre actores, culminando la trama con un apasionado morreo entre ambos.

El rap de Resines, Javier Gutierrez y Juan Diego (2012)

Recordado como uno de los mayores hitos en la historia de los Goya. El Langui empieza a cantar un rap compuesto por él mismo para animar al publico al grito de “cine”. A él se suman Javier Gutierrez y Juan Diego (Los Hombres de Paco) clavando sus rimas. Pero entonces aparece Antonio Resines lanzando palabras sin sentido como si de un ritual satánico se tratara provocando las risas de todo el público y escenario incluido. Incluso, a raíz de ese momento, se crearon páginas satánicas que intentaban descifrar el rap de Antonio Resines.

Adriana Ugarte da el Goya a la persona equivocada (2013)

“El Goya a Mejor Canción Original es para…” recitaba Adriana Ugarte junto a Carlos Santos segundos antes de galardonar al artista premiado. Hasta ahí todo bien, el momento histórico vino cuando Adriana se confundió de sobre y nombró como premiados a la película equivocada, entregándoselo a Los niños salvajes en lugar de a Blancanieves.

Los supuesto premiados ya estaban bajando las escaleras con una sonrisa que se les salía de la cara para recibir el Goya hasta que alguien dijo: “Tenemos que lamentar un error”. Adriana todavía sigue teniendo esa espina clavada.

El activismo de Joaquín Reyes (2014)

Una anécdota para la historia. En una gala en la que David Trueba y su Vivir es fácil con los ojos cerrados se proclamaron ganadores absolutos de la noche, Joaquín Reyes -presentador de la gala- hizo su entrada triunfal con homenaje a Femen, imitando a las activistas bajo el lema 'subid el IVA' provocando las risas de todos los presentes, incluida la de la inolvidable Pilar Bardem.

Resistiré, la protesta por el IVA cultural (2015)

Y el tema del IVA en los Goya duró un año más. Dani Rovira se proclamaba como presentador de una de las galas más divertidas de los últimos años. Larga, como todas, pero con sentido del humor, ritmo y llena de gusto. En ella, el humorista protagonizó otro de los momentazos que quedarán grabados en nuestras memorias, con musical incluido. Con el honorífico Resistiré de Duo Dinámico como apoyo, Dani aprovechó junto a otros actores para protestar por la subida del IVA cultural.

Los tacones de Dani Rovira (2017)

Desde entonces Rovira se agenció las galas de los Goya, siendo el presentador principal en cada una de ellas. En esta, sorprendió al público y a los espectadores al aparecer caminando con unos tacones rojos en plena ceremonia con la intención de hacer un llamamiento a la reivindicación de la mujer en los puestos de la sociedad. Un acto que paradójicamente recibió muchas críticas por parte de algunos espectadores.

Su único objetivo era denunciar la escasa presencia y protagonismo de las mujeres en todos los ámbitos, especialmente en el cine.

Discurso de Jesús Vidal (2019)

El último de la lista, pero no menos importante, es rematado por Jesús Vidal con su emotivo discurso. El actor, con una discapacidad visual, conquistó dentro y fuera de la pantalla y fue galardonado como Mejor Actor Revelación por Campeones, donde interpreta a una persona con discapacidad intelectual. Vidal marcó uno de los momentos más afectivos de la historia de los Goya en sus agradecimientos y al recordar a sus padres: "Mami, gracias por darme la vida, por dármelo todo. Porque hiciste crecer en mí el amor hacia las artes. Y porque me enseñaste a ver la vida con los ojos de la inteligencia y del corazón. Te quiero todo. Don José Vidal Conde, mi padre, gracias por luchar tanto por mí, porque eres la persona con más ternura del planeta, sin pretenderlo, y porque con solo una sonrisa cambiabas, y cambias, el mundo. Queridos padres, a mí sí me gustaría tener un hijo como yo. Porque tengo unos padres como vosotros, muchísimas gracias".

Estos diez momentos que han marcado la historia de los Goya, son solo pequeños ejemplos de cómo cada gala de los famosos premios españoles es diferente. A los diez les acompañan miles de momentos más, incluido el de una gala telemática por la pandemia, y lo seguirán haciendo el resto de ediciones.