El cantante puertorriqueño siempre había pendido de la balada romántica. Con No me doy por vencido ganó renombre y con Aquí estoy yo lo consolidó. Pero para el originario de San Juan las canciones de amor y desamor no tenían el sabor caribeño que se adjudicaba a su explosiva personalidad, y en 2017 lanzó Despacito, el primer paso para conquistar el mundo de la música y la frontera para saltar a la música urbana. Con el éxito llegaron los Grammy, los récord Guinness y un reconocimiento a nivel mundial que ni él mismo se esperaba. Hoy explica la ley de gravedad de la mano de sus últimas producciones en El Hormiguero. 

Luis Alfonso Rodríguez (Puerto Rico, 1978) siempre ha sido un enamorado de la música. Con 10 años se mudó de Puerto Rico a la “ciudad donde vive Mickey Mouse” -según le prometió su padre- (Florida), donde ingresó en la escuela Dr Phillips High School, en la que formó su primer grupo de música, Big Guys. Años más tarde, en la Universidad de Música de Florida, Luis gana una beca para realizar sus estudios y prepararse a conciencia el gran artista musical en el que quería convertirse. Tras el ingreso en el coro de la universidad comienza su primera gira por Estados Unidos y Londres. Y con ello, después cantar siempre en inglés, empieza su carrera profesional como cantante en español, y en 1998 lanza al mercado Comenzaré, su álbum debut nominado a los Billboard. Así, Luis Alfonso daría paso al que hoy conocemos como Luis Fonsi.

El artista se afianzó una firme carrera como cantante de balada romántica. Después de su primer álbum, publicó Eterno en el año 2000, donde encontró el éxito y la gran aceptación del público y se estrenó como compositor, ganando un disco de oro por 100.000 copias vendidas a menos de un mes de estar en el mercado. Se ganó el cariño de Latinoamérica y de España, y gracias a ello llegó a cantar ante el papa Juan Pablo II, ganar el primer Grammy Latino y homenajear a las víctimas de 11-S en la Casa Blanca frente a G.W. Bush. Y siguiendo por el mismo género se atrevió a publicar un tercer disco titulado Amor Secreto, donde se superó a sí mismo, alcanzando el disco de oro a tan solo un día de salir al mercado. En él, Luis Fonsi refleja su madurez artística y así lo afirmó: "Yo veo todo esto como crecimiento. Uno va madurando y evolucionando. Es demasiado importante darle algo nuevo al público, y creo que lo logramos".

Fonsi sacó 3 discos más hasta llegar a dos de sus canciones más conocidas en España durante su etapa de balada: No me doy por vencido y Aquí estoy yo, acompañado de David Bisbal, Aleks Syntek y Noel Schajris. Con este último disco, Palabras del Silencio, fue galardonado con la Antorcha de Plata, de Oro y con la Gaviota de Plata. Lo que le motivó a lanzar el tercer sencillo, Llueve por dentro.

Érase una vez 'Despacito', la canción más escuchada

El cantante siguió con la misma dinámica, hasta que en 2017, se provocaría un suceso internacional que marcaría su vida para siempre, llevándole a alcanzar los éxitos más complejos y darle una vuelta de hoja al arduo camino que se había consagrado durante su carrera profesional. Luis Fonsi lanzaría su primera canción de reggaeton junto a Daddy Yankee con un indomable rendimiento comercial, logrando posicionarse número 1 en más de 80 países hasta ser la canción con más reproducciones en la historia de YouTube. Fue protagonista de telenovelas, videojuegos y partidos de fútbol y así llegó a conseguir cuatro premios Grammy Latinos en 2017 por mejor canción, mejor grabación, mejor fusión/interpretación urbana y mejor vídeo musical versión corta, además de romper los record Guinness por ser la canción más escuchada del mundo y el vídeo "más gustado" de Internet, así como la melodía con más semanas en el número uno de la lista Billboard Hot Latin Songs.

Aunque la canción vino cargada de polémica. Nicolás Maduro la versionó para llamar a votar a la Asamblea Nacional Constituyente del 30 de julio de 2017. Algo a lo que Luis Fonsi -unido a su compatriota, Daddy Yankee- se negó, prohibiendo su uso comercial para fines políticos, dando a entender su malestar e intolerancia a través de Twitter y diversas organizaciones internacionales, despertando el también rechazo de la oposición venezolana, que pidió su suspensión.

Con el éxito vinieron cambios en la vida de Luis Fonsi, quien dejó de ser cantante de balada para pasar a un reconocido artista en el género urbano. Después de Despacito vinieron Date la vuelta, Échame la culpa, Perfecta, Vacío, junto a Rauw Alejandro o Bésame, éxitos que también serán partícipes en su último álbum, Ley de gravedad, el cual irá a presentar esta noche a Pablo Motos en El Hormiguero. Y precisamente este álbum le devuelve a las baladas, pero también saca incluso su parte dance. Un disco que el define como "un viaje", y cuenta que "no hay un solo sonido, no hay un solo ritmo, no hay un solo Fonsi. Mi música es algunas veces muy romántica y a veces muy rítmica, algunas veces las dos".

Luis Fonsi se enamoró de la española Águeda López en 2010, pero su amor por España no se queda solo en su esposa, con quien lleva compartiendo su vida desde entonces y con la que tiene dos hijos, ya que el cantante ha participado en numerosas ocasiones en nuestros programas de televisión. Fue jurado de la última edición de La Voz, compartiendo mesa con Alejandro Sanz, Malú y Pablo Alborán, y apareció en Tu Cara Me Suena cantando Vacío junto al ganador de dicha edición, Agoney.

El 25 de enero de este mismo año, Fonsi vendía su catálogo musical de más de dos décadas a HarbourView por una suma no divulgada: ”Estamos muy emocionados de adquirir el catálogo de ventas multi-platino del artista de renombre mundial", expresó en un comunicado Sherrese Clarke Soares, fundadora de la compañía, de origen jamaiquino. La transacción "une a un artista caribeño icónico con una nueva compañía formidable que comparte raíces caribeñas", señaló la empresa en un comunicado.

Luis Fonsi en los Oscar

Quizá ni se apreció la presentación de los cantantes porque la gala estaba centrada únicamente en la bofetada que Will Smith dio a Chris Rock, de la que ha sido principal tema de conversación durante estas dos semanas. Pero, al contrario de lo que quería la matriarca de los Madrigal (Encanto), sí se ha hablado de Bruno, y mucho. Luis Fonsi, junto a Becky G, fue el encargado de darle el broche final a la canción en los Premios Oscar.