Dos ruedas, dos pedales, un cuadro y un manillar. Estos son los elementos principales de la bicicleta tradicional, uno de los inventos estrella en los últimos 200 años. Su composición con origen decimonónico ha añadido recientemente un complemento que supone una novedad histórica para la bicicleta: el motor. Aquel que haya recorrido unos pocos kilómetros sobre el sillín de una bici sabe que la dureza del ejercicio se dispara con las pendientes. La montaña rusa de subir y bajar rampas castiga a la musculatura, mientras que las escaladas eternas terminan por asfixiar al ciclista hasta la extenuación. Curiosamente, los parajes más apetecibles, tentadores y emocionantes se encuentran en rincones montañosos; es ahí donde radica la importancia de las bicicletas eléctricas, que han sido claves para poner este tipo de recorridos al alcance de aficionados de todos los niveles y no solo para las piernas de acero.

España en E-Bike (GeoPlaneta), de Sergio Fernández Tolosa (Barcelona, 1974), contiene 88 itinerarios abordables para ciclistas tradicionales aunque especialmente seductores sobre el susurro del motor eléctrico. Esta biblia del cicloturismo combina rutas con caminos, pistas forestales y carreteras de montaña en las que se huye de las dificultades técnicas. Dentro de la información más destacada, se incluye la descripción del recorrido, fotografías y mapas para GPS, además de una guía práctica muy aprovechables, sobre todo para los menos experimentados. España en E-Bike se divide en cinco grandes bloques geográficos: Sur, Este, Pirineos, Cantábrico y Centro.

Portada de 'España en E-Bike'

"Una pasión que ha cambiado mi vida"

Fernández , que ha recorrido a pedales los desiertos de Australia, Atacama, Mojame, Namib, Kalahari, Gobi y Sáhara, fue alcanzado por el flechazo del cicloturismo "cuando era un chaval prácticamente imberbe". "Tenía 16 años, mucha energía y unas ganas irrefrenables de ver mundo. De aquella primera escapada por el Pirineo junto a mi vecino Aitor solo guardo buenos recuerdos", señala Fernández, .

El autor destierra con España en E-Bike el mito de que el ciclista tiene que llegar al límite para disfrutar. "El cicloturismo consiste en ir a dar una vuelta con la bici, hacer ejercicio, fundirme con el paisaje, descubrir nuevos lugares, sufrir a ratos, pero sin pasarme, lo justo para llegar a casa con el cuerpo tonificado y el cerebro lleno de endorfinas y buenos momentos (...) Y para experimentar todo esto, la bicicleta es la compañera perfecta".

La mayoría de itinerarios han sido diseñados por el propio Fernández bajo una condición, "siempre en busca del trazado ideal para disfrutar de la bicicleta". "Esta guía es el compendio de las mejores rutas de cicloturismo que he realizado en España, en donde nos aguarda su inmensa diversidad de paisajes naturales, su fauna y su flora, su gente, su variada gastronomía y su riqueza cultural, artística y arquitectónica" indica Fernández.

Fernández que narra en su blog 'Con un par de ruedas' sus pedaladas por todo el mundo, "desde los glaciares de la Patagonia hasta las estepas de Mongolia", asegura que "este libro es una oportunidad de compartir los frutos de mi irreprimible necesidad y crear nuevas ruta". "Una pasión que ha macado mi vida", concluye Fernández.