Rituales de San Juan 2022: dónde y cuándo se celebran

La antagonía que consume la noche de San Juan es tal como que se celebra en honor al Sol cuando cae la media noche o que se trata de una fiesta celebrada por cristianos bajo el nombre de un predicador judío. Pero eso no es de demasiada importancia cuando se trata de la bienvenida al verano, de la noche más larga del año, que cubre las playas y jardines de hogueras que invitan a realizar todos los rituales y creencias que puedan existir.

Cuenta la leyenda de la noche de San Juan que su verdadero origen proviene de hace miles de años, cuando los paganos realizaban fiestas de cultos al sol, por ser considerado uno de sus dioses y el astro rey. Pero la llegada del cristianismo, cambió el modo y motivo de celebración. Según la Biblia, la fecha (24 de junio) corresponde al nacimiento de San Juan Bautista, razón por la que su padre Zacarías pidió encender una hoguera. Con ello, el cristianismo asimiló esta tradición y la adaptó a su calendario. Una historia muy diferente a la tradición pagana y que explica por qué la celebración no coincide con el solsticio de verano. En el segundo caso, se encendían las hogueras para dar más fuerza al sol, que en esa fecha va perdiendo energía y los días se van haciendo más cortos. Así, se conseguía prolongar la luz y servía al mismo tiempo para renovar y purificar las energías con el fin de obtener mejores resultados tanto en las futuras cosechas como en otros ámbitos de la vida diaria.

Se celebra en muchos puntos de Europa, aunque está especialmente arraigada en Inglaterra, España, Portugal, Noruega, Dinamarca, Finlandia y Estonia. En América del Sur se acercan al solsticio de invierno, aunque también celebran la famosa noche, especialmente en el nordeste de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Cuba, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú, Puerto Rico y Venezuela.

Seis lugares para celebrar la mágica noche

San Juan es una de las fiestas más importantes en Alicante. Sus hogueras son declaradas de Interés Turístico Internacional y la celebración es parecida a las falles, donde se van colocando en las pirncipales plazas y calles de la localidad un centenar de monumentos de cartón que simulan la hoguera, de diferentes temáticas para arder en la cremá. En La Coruña, las meigas y brujas salen a las calles para celebrar la animada noche, denominada ‘noite de meigas’, que tiene lugar en las playas de Orzán y Riazor, donde se queman los troncos de madera para ahuyentar el mal.

Otro de los lugares donde más se celebra la noche de San Juan, que coincide con las fiestas patronales de la isla es en Ciudadela (Menorca). Aquí los festejos se remontan a la Edad Media (siglo XIV), donde fuegos artificiales y guerras de avellanas se reúnen en un evento que es un verdadero reclamo turístico. Además, caballos engalanados saltan entre la gente dan vueltas a la Plaça des Born y protagonizan juegos medievales.

En Málaga se juntan los espetos, los fuegos artificiales, las hogueras y la quema de los júas o juanes en las playas de La Malagueta y La Misericordia. En Badajoz coincide con el patrón de la localidad, por lo que es la fiesta más importante de Extremadura. Por la misma razón, se concentran multitud de actividades festivas durante toda la semana: atracciones, tуmbolas, una oferta de casetas con comida tradicional, discotecas, conciertos… Por último, otra de las localidades que celebra la noche de San Juan a lo grande es Soto de la Marina (Cantabria). Allí se celebra la tradicional hoguera donde miles de personas se reúnen en torno a esta y se llevan. Cabo verbenas, espectáculos de magia, de danza, de fuego, sesiones de DJ, etc.

Rituales de la noche de San Juan: de saltar nueve veces la hoguera a poderes curativos

Las tradiciones de San Juan son multitudes. En Francia se dan nueve vueltas alrededor de la hoguera si quieren casarse el año que viene. Además, si tienes pareja y quieres saber si te casarás con ella, la tradición marca que tienes que colocar dos agujas dentro de un bol con agua, y si al final de la noche las agujas se han juntado, la respuesta es sí.

Otra es que los solteros que asomen la cabeza por la ventana de su casa verán al amor de su vida. También que si no quieres estar con sueño todo el año, debes levantarte el 24 al salir el sol.

Otra leyenda de la noche de San Juan narra que las ramas que quedan sin quemarse en las fogatas deben ser llevadas a las casas, una antigua creencia asegura que impiden los incendio. Por otra parte, se dice que si deseas alejar la adversidad tienes que hacer una hoguera el 23 de junio y preparar un poco de agua del santo a través del rocío, símbolo de la luna. Esta agua, en particular, simbolizaría la suerte y la prosperidad frente a la calamidad y la infertilidad de los campos. ¿Cómo se prepara el agua para este ritual de San Juan? Se mezclan hierbas, flores y rocío. El compuesto se usaría la mañana del 24 para lavarse las manos y la cara.

Y por último, que el primer rayo de sol que alumbra el amanecer del día 24 hace que aguas de arroyos y fuentes se vuelvan mágicas y adquieran especiales poderes curativos.

Tradiciones que no pueden faltar en la noche de hogueras

Mientras que en parte de Andalucía es tradición quemar muñecos de trapo llamados 'juanes', lo más común es quemar cosas viejas que, por lo general, suelen ser muebles, para recibir la nueva energñia y tener buena suerte. Esto ocurre porque muchas personas interpretan el solsticio de verano como una renovación.

A la quema de objetos se suma la más típica: saltar las brasas. Antiguamente se atrevían a saltar la hoguera directamente para poder estar protegido contra la mala suerte, haciéndolo además, un número impar de veces, pero este ritual ha evolucionado hasta saltar únicamente las brasas que, evidentemente es mucho más seguro. Sobre todo en Cataluña y la Comunidad Valenciana, se enciende una hoguera en la playa y una vez el fuego comienza a estar bajo, se saltan las brasas mientras se pide un deseo o simplemente para atraer la suerte.

Y hablando de deseos, otro de los rituales de la noche de San Juan es el de escribir algo en un papel y lanzarlo a la hoguera con el fin de que se cumpla, o coger las cenizas de ese papel y tirarlas al mar, ya que se dice que en la noche de San Juan el agua purifica.

Para los más jóvenes, la celebración va de la mano del fin de las clases. Su tradición es lanzar al fuego los apuntes y los libros del curso que acaba de finalizar.