Tres millones de euros es lo que se va a gastar el Ayuntamiento de Madrid en impulsar a la capital española para que se convierta en una de las ciudades de moda del mundo. Los eventos comienzan el jueves 9 de febrero y se arrastrarán hasta el día 19 con el objetivo principal de atraer a público de otros países como ya consiguen Milán, Londres, París o Nueva York. Los diseñadores españoles serán los protagonistas absolutos de la Mercedes Benz Madrid Fashion Week, y estas son las medidas que han puesto en marcha para impulsar su internacionalización.
Los españoles no serán los únicos sobre la pasarela. Participará la mexicana Lorena Saravia, reconocida diseñadora más allá de las tierras americanas. Será la firma internacional invitada por el programa de intercambio de talentos de Mercedes-Benz, pero habrá más mezcla cultural de otra parte del mundo. También tendrá lugar el desfile "Morocco, Kingdom of Light", con dos artistas de la alta costura de Marruecos, Artsi Ifrach con su marca Maison Artc y Albert Oiknine.
Para alcanzar repercusión mundial, la Fashion Week espera contar con prensa internacional. Entre ellos de México, Colombia, Estados Unidos, Italia, Francia o Serbia. Sin embargo, se destaca la presencia de la editora jefa de L'Officiel Arabia: "Periodista muy reconocida y seguidora habitual de otras fashion weeks", según ha señalado Juan Arrizabalaga, director general de IFEMA Madrid. Hace referencia a la diseñadora Vanessa Bellugeon, que estuvo, por ejemplo, en la Semana de la Moda de París hace solo unos días.
Cobrar por los desfiles
Juan Arrizabalaga ha señalado que se pone en marcha una prueba piloto que pretende seguir los pasos de otras pasarelas internacionales como Nueva York, Londres, París o Milán. Un test con el que pretenden medir el interés que tiene la pasarela como evento "experiencial y cultural". "Se trata de poner en valor la capacidad de atracción social del mundo de la moda" para acercarla a nuevos públicos.
¿Cómo? Cobrando por ella. Tradicionalmente la entrada a los desfiles en IFEMA estaba reservada para invitados del diseñador, de la agencia de comunicación, estudiantes o de los medios. Ahora un número determinado de plazas será para aquellos que han desembolsado 60 euros para poder entrar.Las palabras del director general de IFEMA no son del todo ciertas, porque en París no se paga por entrar a los desfiles. Sí en otras ciudades.
En 2014 en Milán costaba 70.000 euros ver en primera fila los shows de Prada, Armani y Fendi. En 2019 se pusieron por primera vez a la venta tickets para una selección de pasarelas en la Semana de la Moda de Londres, con precios que iban desde los 151 hasta los 275 euros. Pero en el caso de Nueva York, los 60 de la MBMFB quedan muy lejos. En la Gran Manzana podrías hacerte con una entrada entre 27 y 1.500, dependiendo de si lo quieres ver de pie o sentado, con "regalos" o sin ellos.
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