España ya se ha contagiado por completo de la tendencia del Black Friday, ese día en el que las tiendas ofrecen (supuestamente) importantes descuentos. Y es reseñable que la tradición ya forme parte del país, puesto que surge en Estados Unidos y se celebra en el día después de Acción de Gracias. Una fiesta que los españoles no celebran. Pero, ¿cuál es la historia del Black Friday?

Tradicionalmente, en Estados Unidos el otoño se divide en tres etapas al terminar el verano. Octubre es para Halloween, noviembre para Acción de Gracias y diciembre para Navidad, y las tiendas utilizan cada una de estas fiestas para potenciar la compra después de la cuesta de septiembre. Por eso, en el primer día de la temporada navideña es habitual que las tiendas den comienzo a las ofertas para atraer a los clientes de cara a los regalos.

El Black Friday se celebra el viernes siguiente a Acción de Gracias. | Photo by Andrea Piacquadio

En los cincuenta, con el auge de las grandes superficies, comenzó a ponerse de moda pasar el viernes y el sábado de Acción de Gracias haciendo las primeras compras de Navidad. Pero, ¿de dónde sale el nombre?

Las leyendas que rodean al Black Friday

Hay muchas teorías sobre los motivos por los que el Black Friday, un día asociado con las compras, tiene el mismo tipo de nombre que jornadas nefastas en la economía como el jueves negro de 1929. De hecho, hay un viernes negro producido el 24 de septiembre de 1869 por la especulación del oro que produjo una importante crisis económica.

Sin embargo, nada tiene que ver con la tradición del Black Friday. Tampoco es cierto que las tiendas pasaran el año en "números rojos" y se recuperaran solo en el día después de Acción de Gracias. Y la versión que se ha popularizado en los últimos años de que los esclavos, en la época de las plantaciones en el siglo XIX, se vendían a mitad de precio en esta jornada también ha sido descartada.

La verdadera historia del Black Friday

La tradición de llamarlo 'Black Friday' comenzó en Philadelphia. | Photo by Sora Shimazaki

La versión que ha resultado ser cierta, según confirman medios estadounidenses como NBC, ABC o el canal Historia, es totalmente inesperada. En los cincuenta, después de que se popularizara ir a comprar regalos de Navidad tras la cena de Acción de Gracias, la policía de Philadelphia quiso evitar aglomeraciones y problemas.

A la ciudad se acercaba mucha gente para comprar las primeras decoraciones y buscar los descuentos. Pero también para acudir al habitual partido de fútbol americano que se celebraba el sábado, según cuenta Bonnie Taylor-Blake, investigadora de la Universidad de Carolina del Norte.

No solo había problemas de tráfico, también aglomeraciones, enfrentamientos entre clientes... incluso crecían los pequeños hurtos de aquellos que aprovechaban del caos. Los policías lo odiaban y empezaron a llamarlo Black Friday, infusionando todas sus impresiones negativas en el nombre. Su intención era que, al hacerse popular, la gente prefiriera espaciar sus compras y evitar las colas y los problemas.

Cuando llegaron los 60, el nombre estaba más que extendido en Philadelphia. Tenía tantas connotaciones negativas que los grandes almacenes quisieron cambiarlo a Big Friday, pero no lo consiguieron. Tampoco los policías alcanzaron su propósito, seguía siendo una cita imprescindible para los estadounidenses.

Los centros comerciales se preparan con antelación para este día de compras | Imagen de Daniel Nebreda en Pixabay

Tardó varias décadas en popularizarse en Estados Unidos

A pesar de que en los 60 ya era un término habitual en Philadelphia, no se extendió por todo Estados Unidos hasta mucho más tarde. Según muestran los registros de medios de comunicación, no fue hasta 1985. Para entonces, las tiendas ya habían conseguido darle la vuelta a la tortilla y el Black Friday se había convertido en una festividad más.

Una ocasión para adelantarse a las prisas de las fiestas y para comprar más barato, así es como se promociona ahora esta cita. Año más tarde llegó el Cyber Monday, que corresponde a las ofertas que surgen solamente en internet el lunes siguiente al Black Friday. La versión china de la misma estrategia es el Singles Day, que se celebra el 11 de noviembre.