Los 'Sephora Kids', la peligrosa ansia infantil por la perfección estética

Cualquiera que se pasee un viernes por la tarde por una de las principales tiendas de cosméticos puede verlo. Grupos de niños y niñas preadolescentes miran, revisan y se prueban diferentes productos de belleza. Se trata de una tendencia que preocupa ya en Europa y que viene directa de las redes sociales. De hecho se hizo viral por el vídeo de una usuaria de Tik Tok que compartía su experiencia con una niña que se gastaba cientos de euros en Sephora. De ahí el nombre de Sephora Kids con el que se ha bautizado este fenómeno.

El acceso a los móviles y a aplicaciones como YouTube o Tik Tok ha normalizado un nuevo paso en el día a día de los más jóvenes. Se llama rutina de belleza: un conjunto de rituales para perfeccionar la piel y potenciar la belleza. El orden sería, si se sigue de pe a pa: doble limpieza (con aceite y después con jabón), tónico, esencia, sérum, contorno de ojos en sérum y después en crema, crema hidratante y protector solar. Si después va una rutina de maquillaje toca el primer, los diferentes productos, polvos matificantes y/o spray fijador.

Una rutina de diez pasos

Multitud de pasos que antes eran exclusivos de personas maduras y que ahora empiezan a poner en práctica mañana y noche chavales desde los 8 años, según cuentan algunos trabajadores de este tipo de tiendas. "Muchas veces intentamos que no lo hagan", comenta Belén, empleada de una conocida cadena de cosméticos, que dice que los que más vienen tienen entorno a 14 años. "Quieren tener un montón de cosas, exfoliantes por ejemplo compran un montón, también niacinamida y el ácido hialurónico de The Ordinary", explica.

The Ordinary es precisamente una de las firmas que comenzó la moda de hacer una rutina facial con multitud de pasos y con diferentes activos. En su web ponen a la venta packs completos en los que se proponen diferentes objetivos o problemáticas cutáneas: antiarrugas, piel grasa, hidratantes... Su estética minimalista y precio reducido marcó, además, el paso para el resto de firmas y convirtió a todo el mundo en expertos en química farmacéutica. Ahora, para evitar la polémica de los conocidos como Sephora Kids, han publicado en sus redes sociales un mensaje para los adolescentes: "No necesitáis diez pasos".

Cosmeticorexia, la preocupante tendencia

Por ejemplo, para la hidratación recomiendan ácido hialurónico, y para regular el sebo en pieles acneicas la niacinamida. Ambos son activos "amables", pero como menciona Manuel, farmacéutico, pueden producir efectos adversos y no deberían utilizarse sin el consejo de un profesional. Es más preocupante aún cuando son exfoliantes más agresivos como el ácido salicílico, la vitamina C o, peor aún, el retinol.

Algunos expertos le han puesto ya nombre a esta realidad. Lo llaman cosmeticorexia, la obsesión por la cosmética en un momento de cambios hormonales que puede llegar a ser dañina para la piel. "Un adolescente no tiene que hacer más que limpiar la piel, algo de hidratación y protección solar", comenta el farmacéutico consultado por El Independiente.

"A partir de los 25-30 años, nuestras necesidades cambian y debemos aportarle ese plus de ácido hialurónico, antioxidantes y retinol. Cuando los usamos antes, estamos rompiendo nuestra barrera dermocutánea, pudiendo producir irritaciones, dermatitis e incluso quemaduras", explica la doctora y médico estético Alejandra Olmo.

Los peligros del retinol

Una simple búsqueda en internet ofrece multitud de artículos sobre cómo el retinol es la solución que parece resolver todos los problemas de la piel. Nada más lejos de la realidad. Este derivado de la vitamina A está muy regulado en Europa (más que en Estados Unidos) por los riegos que entraña su uso.

Trata arrugas y manchas, y también puede favorecer en pieles con acné. De hecho la isotretinoina, conocida popularmente como roacután (que es un nombre comercial), es también un derivado de la vitamina A. Sin embargo, las potenciales consecuencias que tiene su uso indiscriminado son peligrosas: puede quemar la piel o sensibilizarla, es fotosensible y es incompatible con otros activos muy habituales como los ácidos glicólico o salicílico.

Por eso la Unión Europea ha puesto en firme su decisión de prohibir el retinol con una concentración superior al 0,3% en productor generales y lo limita al 0,05% en lociones corporales. Aunque la normativa no estará vigente hasta el próximo año, la defensa de la nueva ley está en que la población está expuesta a niveles más altos de vitamina A por la alimentación o suplementos orales. La intención es evitar sobredosis de estas sustancias, cuyos síntomas incluyen visión borrosa, hinchazón o dolor de huesos, mareos y vómitos o daño hepático, entre otros.

No son las únicas compras de los Sephora Kids

"Los padres aprovechan para comprar a sus hijas por Navidad y cumpleaños productos de Kylie Cosmetics o de Florence", comenta Belén desde una cadena que vende cosméticos. Se refiere a las marcas de Kylie Jenner y Millie Bobby Brown, que ofrecen tanto cuidado facial como maquillaje. Pero en el día a día, su experiencia dice que los más jóvenes compran productos lowcost como los de Essence, Catrice o Maybelline.

Lola, maquilladora y trabajadora de otra conocida tienda, dice que los más jóvenes vienen con las ideas claras del producto que quieren. Si compran uno de los coloretes de Rare Beauty, la marca de Selena Gomez, solo es en los tonos virales (los colores Joy y Happy). "Los que envían las agencias de comunicación a las influencers son los que se acaban siempre", comenta. "Van por tendencia absoluta. No es realmente el producto sino el tono", insiste. También pasa con los diferentes tratamientos de Drunk Elephant, cuyo producto más barato cuesta 20,99 euros.

Ante la pregunta de qué cantidades se gastan este tipo de clientes, Lola asegura que pueden llegar a comprar por valor de unos 100 euros. "Si se llevan dos o tres productos la cesta ronda ese importe", explica, aunque también ha visto casos en los que niñas de 9 años se llevan productos sorprendentes. "Hasta los lip injection de Too Faced", señala. Hace referencia a un brillo o perfilador de labios que crea una sensación de hormigueo e irritación que inflama ligeramente los labios.

A Belén le llama la atención también en su tienda la venta del perfume de Zadig & Voltaire, cuyo precio ronda los 40 euros en los botes de 30ml. "Tenemos colonias pensadas para sus edades, más suavecitas, pero nada", confiesa.

¿Dónde están los padres?

Ante la pregunta de si van solos o acompañados, ambas trabajadoras explican que depende, y que el comportamiento de los jóvenes varía mucho en cada caso. Cuando van con sus padres se dejan aconsejar con mayor facilidad: "A veces las madres las intentan parar un poco", explica Belén.

Cuando van solos solo preguntan si hay algo que no encuentran. Vienen con una idea clara de lo que quieren porque lo han visto en perfiles de influencers como Lola Lolita (950.9 millones de seguidores en Tik Tok) o Claudieta (1.8 millones en Tik Tok).