Borja Jiménez se ha convertido este viernes en el primer matador de toros en abrir la Puerta Grande de Las Ventas en el antepenúltimo festejo de la Feria de San Isidro.

El torero sevillano cortó una oreja a cada toro de su lote. Sin embargo, en el primero estuvo a punto de cortar las dos orejas del extraordinario toro de Victoriano del Río. El presidente del festejo, José Luis González, hizo caso omiso a la petición masiva de la segunda oreja y, además, dejó sin el premio de la vuelta al ruedo en el arrastre a este segundo toro de la tarde.

Con el quinto bis, un sobrero de Torrealta, Borja Jiménez cortó el trofeo que le permitía abrir la Puerta Grande.

Emilio de Justo y Roca Rey salieron de vacío en una tarde en la que la negativa del presidente provocó una bronca monumental del público que se reprodujo en diferentes momentos del festejo.

Al terminar el festejo, Jiménez dio la vuelta al ruedo en hombros acompañado por decenas de aficionados que saltaron a la arena. La salida por la Puerta Grande fue clamorosa entre gritos de ¡torero, torero!