Cantabria es esa pequeña región del norte de España que nos conquista siempre por su belleza natural y sus pueblos pintorescos, donde el tiempo parece detenerse. Alejada de las multitudes turísticas, Cantabria se revela como una región por descubrir, un tesoro de verdes valles, imponentes montañas y costas escarpadas.

Adentrarse en los pueblos de Cantabria es sumergirse en el alma de la región, donde la naturaleza y la cultura se unen en un lugar mágico. Es un viaje a través de la arquitectura popular, las calles empedradas, las iglesias llenas de historia y las vistas que quitan el aliento.

Si viajas a Cantabria, escoge Bárcena Mayor, elegido el pueblo más bonito para ir en septiembre por National Geographic

Cada pueblo tiene su encanto especial. Pero si hay un pueblo a elegir para visitar, ese es Bárcena Mayor, elegido por National Geographic como el más bonito para visitar en septiembre en Cantabria, y como uno de los cinco más bellos de toda la Península.

Declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1979, Bárcena Mayor cautiva con su espectacular arquitectura popular montañesa. Conocido como el pueblo más antiguo de Cantabria, es el único que está situado dentro de este Parque Natural, en lo que algunos de sus lugares imperdibles son la iglesia de Santa María (del siglo XVII), las antiguas casas rectorales y los lavaderos públicos.

Bárcena Mayor es lo único habitado en el Parque Natural de Saja-Besaya

Situada en un valle flanqueado por pequeñas colinas, Bárcena Mayor es el único núcleo habitado dentro de los límites del Parque Natural de Saja-Besaya.

En la década de los 90', el pueblo fue acondicionado para el turismo. Durante esa época, se mejoró la carretera comarcal que conduce al pueblo, se construyó un aparcamiento en el exterior y se peatonalizó el casco antiguo. Desde 2015, Bárcena Mayor pertenece a la asociación de 'Los Pueblos Más Bonitos de España'.

La peculiaridad de este pueblo, más allá de arquitectura montañesa, sus calles empedradas, casonas balconadas y su naturaleza con el río Argoza, es que tan solo puedes descubrirlo a pie, ya que no está permitido que pasen los coches.

Como menciona National Geographic, "el efecto es como si todo el pueblo brotara del mismo asfalto, que se interrumpe para dar paso sin impedimento alguno a las calles adoquinadas".

El tipo de casa más característico responde al modelo de casa montañesa de hábitat rural. En ellas, los muros medianeros típicos cántabros sobresalen en la primera planta a partir de ménsulas en S para cobijar la solana, que se empieza a introducir en el siglo XVII con la llegada del maiz y la necesidad de tener un espacio donde secar el cereal.

Aquí, los robles y las hayas centenarias son el hogar de animales como el oso pardo y el urogallo, una especie en peligro de extinción cuyo canto solía resonar en estos bosques. La excelente conservación de Bárcena Mayor, su ubicación privilegiada y su deliciosa gastronomía, encabezada por el famoso cocido montañés, lo han convertido en uno de los destinos más visitados de Cantabria