Incendios en California: Leonardo DiCaprio, Ben Affleck, Billy Crystal y otros famosos de Hollywood han perdido sus casas

Los destructores incendios de la selva que asolan California han llegado a niveles extremos, destruyendo comunidades enteras y afectando a miles de personas, entre otros, a celebridades de Hollywood. Los incendios han causado hasta ahora cinco fallecidos y más de 150.000 evacuados, y no tienen intención de parar.

Causas de los incendios y una lucha sin fin

Los incendios forestales que azotan California, en particular el sur de este estado, han llegado a convertirse, aún más, en una emergencia recurrente y devastadora. Este año en cuestión, los vientos de Santa Ana y la excesiva sequedad del entorno han alimentado las llamas, dificultando los intentos de control. Estos dos factores han contribuido, además, a que lo que antes era una época de incendios haya pasado a ser un inconveniente durante todo el año gracias al cambio climático. "No hay temporada de incendios, es un problema permanente", han afirmado el gobernador Gavin Newsom.

En estas últimas horas, el incendio declarado más alarmante de todos los que están activo en Los Ángeles alcanzó las colinas de Hollywood, donde se encuentran el cartel de Hollywood, el Paseo de la Fama, el Teatro Dolby y otros lugares icónicos. Esto ocurre mientras las llamas han consumido ya más de 11.000 hectáreas en Pacific Palisades, en Malibú y en Santa Mónica. Son incendios que ya son considerados los más destructivos de la historia moderna de la ciudad.

Famosos afectados por el incendio

Las colinas de Hollywood y comunidades adineradas como Pacific Palisades y Malibú, donde viven algunas de las estrellas del mundo del espectáculo, han sido arrasadas. Actores como Leonardo DiCaprio, Ben Affleck, Billy Crystal, Reese Witherspoon, Michael Keaton y Steven Spielberg están entre las celebridades cuyas mansiones han sido devoradas por las llamas.

En una de sus últimas publicaciones en las redes sociales Paris Hilton mostró la devastación que había sufrido al ver su hogar hecho cenizas. "Sentarnos con mi familia a ver las noticias durante horas e incluso contemplar en televisión la forma en que nuestra casa en Malibú arde de esta manera es algo que nadie debería tener que vivir", expuso en Instagram. Por su parte, James Woods, que parecía muy emocionado en el reportaje, expresó su sufrimiento de la siguiente forma: "Un día estar nadando en la piscina y al día siguiente ya no queda nada. Había tanto caos que parecía un verdadero infierno".

Otras caras célebres emplearon sus soportes para manifestar su apoyo a las víctimas. La actriz Kate Beckinsale que también tenía su domicilio en Pacific Palisades prestó ayuda a quienes lo han perdido todo. Mientras tanto, Ben Affleck desaloja su casa para refugiarse en casa de Jennifer Garner madre de sus tres hijos. Este elenco de los desdichados continúa creciendo por el efecto directo de esta tragedia en los altos círculos de Hollywood.

Otros famosos como Adam Brody y Leighton Meester también se han visto afectados por los incendios en California, cuya mansión ha quedado totalmente calcinada por las llamas. Los actores han tenido su año después de Nobody Wants This, transmitida en Netflix, y lucieron muy enamorados el pasado lunes en la alfombra roja de los Globos de Oro.

Impacto en lugares icónicos y producciones cinematográficas

Los incendios han puesto en jaque, así mismo, a emblemas de la cultura y la industria cinematográfica de la ciudad de Los Ángeles, como el Paseo de la Fama o los teatros Chino y Dolby que han sido evacuados con la importante afectación de Sunset Boulevard, entre otros. El instituto Charter de Palisades, célebre por ser un lugar de rodaje de filmes como Carrie o Teen Wolf, ha sido absolutamente consumido por las llamas.

Producciones de películas y actos también han sido impactados. Ejemplos de esto son la presentación de Imparable, una película protagonizada por Jennifer López y un número de actividades de producción de películas han sido interrumpidas. Los premios del Sindicato de Actores se anunciarán virtualmente para mantener la seguridad.

Las llamas han dejado un rastro de destrucción y devastación. Más de mil estructuras se han reducido a cenizas, incluida una mansión que tiene un precio estimado en millones, como por ejemplo la mansión de Kim Kardashian en Malibú por la que pagó 70 millones de euros (70,3 millones en total). En la zona trabajan cientos de bomberos a contrarreloj y 300.000 viviendas están sin electricidad, mientras que las autoridades intentan controlar la situación, pero la gestión de recursos es muy criticada.