En un mundo cada vez más inmerso en lo digital, la susceptibilidad de incurrir en fraudes web está creciendo exponencialmente. La Guardia Civil ha emitido una advertencia que ya está generando intranquilidad a lo largo de España. Corresponde a una reciente modalidad de estafa en la cual los ciberdelincuentes consiguen hacerse pasar por los usuarios, sustraer detalles privados e incluso acceder a sus cuentas bancarias, todo lo anterior gracias al desconexión de sus móviles.

Cómo actúan los estafadores

La metodología de los criminales es compleja y empieza con una etapa de adquisición de datos. Mediante técnicas tradicionales como el phishing, llamadas engañosas o derrames masivos de información, los estafadores logran sustraer la información privada de sus víctimas. Con estos datos críticos, se ponen en contacto con las empresas de telefonía para solicitar una réplica de la tarjeta SIM. A partir de aquí, el teléfono del usuario queda inutilizable, mientras que los criminales pueden proceder a usar todos los códigos de autenticación enviados por las entidades bancarias, consintiéndoles realizar compras y otros cargos fraudulentos a la cuenta del afectado.

El cuadro es serio, ya que no solo conlleva la pérdida del acceso al teléfono, sino que también significa una serie de transacciones bancarias no consentidas. Un número creciente de usuarios han comenzado a revelar cargos que no validan, siendo muchos de estos el resultado directo de este nuevo fraude web.

Recomendaciones de la Guardia Civil

Ante esto, la Guardia Civil ha proporcionado ciertas recomendaciones para evitar ser engañados. Una de las más destacadas es habilitar la autenticación de dos factores para las cuentas bancarias. Esta capa extra de seguridad permite validar cualquier intento de acceso mediante un mecanismo alterno al SMS, como puede ser la identificación por huella o la firma digital. Además, se sugiere a los usuarios que adopten medidas de seguridad como un registro biométrico o las llaves de acceso de Google, que brindan una capa de protección superior.

Otra guía esencial es siempre desconfiar de los correos, mensajes o llamadas de números desconocidos, en particular aquellos cuyo origen parece dudoso. La Guardia Civil aconseja no dar clic a enlaces sospechosos y abstenerse de compartir datos privados, como contraseñas o números bancarios, vía telefónica o mail.

Qué hacer ante esto

Más allá de las precauciones a adoptar, la Guardia Civil resalta la relevancia de actuar con prontitud en caso de ser víctima de estos engaños. Es fundamental revisar regularmente las operaciones bancarias y, si se descubre alguna actividad sospechosa, contactar de inmediato al banco para bloquear el acceso a la cuenta. Hacerlo en persona siempre que sea posible para eludir posibles fraudes adicionales.

La Guardia Civil también pone énfasis en que los afectados por estos delitos deben recolectar cualquier testimonio disponible, como mails, pantallazos o mensajes, para simplificar la tarea de las autoridades en su investigación.

Este tipo de delitos no solo amenazan los ahorros de los usuarios, sino que también evidencia una tendencia alarmante de los ciberdelincuentes a adaptarse a las nuevas tecnologías, convirtiendo la existencia digital en un escenario de guerra en donde se debe estar siempre en guardia. Con la escalada de los fraudes online, es primordial que todos adaptemos las medidas necesarias para resguardar nuestros equipos y cuentas bancarias.