El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte tiene la capacidad para acreditar, en este ciclo, tres variedades de cereza adicionales, denominadas Van, Lapins y Burlat. Esto sucede tras conseguir la adaptación de su Pliego de Condiciones. Gracias a estas nuevas acreditaciones, la D.O.P podrá disponer de entre diez a doce millones de kilos adicionales de cereza, dado que el clima sea favorable. Esto permitirá contar con producto acreditado en el mercado durante el periodo completo de cosecha en el valle del Jerte.

Según Europa Press, el líder de la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte, José Antonio Tierno, ha subrayado que la autorización de innovadoras variedades de cereza es una "extraordinaria noticia" dado que permitirá al consejo "cumplir con las peticiones del mercado". En consecuencia, "ganar más visibilidad de la C.O.P Cereza del Jerte frente a los consumidores, resultando en una ventaja para los cultivadores al seguir gozando de un producto distinto y único". "Estas adiciones complementan a la picota, que continuará siendo nuestro símbolo y estandarte porque es una variedad exclusiva del Valle del Jerte", finalizó Tierno.

En busca de soluciones para combatir al cambio climático

La entidad D.O.P. ha planteado la necesidad de integrar nuevas variedades de cultivo para combatir la disminución de la producción vista en las recientes campañas. Este declive se debe al cambio climático y al progreso natural de los cultivos. Ha habido un incremento de un grado en las temperaturas mínimas y de 2.5 grados en las máximas en el Valle del Jerte durante las últimas tres décadas, con cambios significativos en la cantidad de lluvias anuales. Este cambio climático ha impactado a las especies nativas, dando lugar a floraciones prematuras e irregulares y acortando el periodo de maduración de la fruta. Como resultado, según Tierno, ha habido una evidente reducción en la cantidad de fruta certificada producida durante los últimos años.

Las especies Van, Lapins y Burlat

La incorporación de las variedades de cereza como Van, Lapins y Burlat va a posibilitar la ampliación de la producción. Previo a este cambio, el mercado de la cereza y picota respaldado por la D.O.P. Cereza del Jerte se extendía desde mediados mayo hasta mediados junio. Con la adición de estas nuevas variedades, la duración se ampliará desde abril hasta agosto.

Las recientes incorporaciones en el abanico de cerezas disponibles en el Valle del Jerte han tomado un papel prominente durante los últimos treinta años. Al ser cultivadas en una geografía común, estas variedades disfrutan de perfiles similares en términos de topografía, composición de suelo, clima e hidrografía como el resto de cerezas y picotas previamente certificadas. “Estas variedades destacan por su dulzura y sabor incomparables, paralelos a todas nuestras frutas cultivadas en Jerte”, indica Tierno.

Por otro lado, estas nuevas variedades se suman a la lista de los cuatro tipos de cerezas (Navalinda, Van, Lapins y Burlat), y cuatro picotas (Ambrunés, Pico Colorado, Pico Negro y Pico Limón Negro). Además, la inclusión de estas variedades contribuye a un adelanto en la temporada de cosecha. Destaca la variedad Burlat, que inicia su producción desde finales de abril hasta mediados de mayo, presentando un calibre de entre 22 y 26 milímetros. La variedad Van hace acto de presencia desde mediados de mayo hasta junio con un tamaño de entre 24 y 28 milímetros. Finalmente, la variedad Lapin es la última en aparecer, desde mediados de junio hasta agosto. Se distingue por tener el calibre más grande, con tamaños que oscilan entre 24 y 32 milímetros.