La tecnología lleva el Museo del Prado a tu sofá

El Museo del Prado, el Teatro Real y el Museo Arqueológico Nacional comparten, además de ser históricos baluartes de la cultura en España, una característica común: todos han decidido acercarse a la gente, mostrarse más accesibles para todo el mundo, a través de la tecnología.

Ya sea con aplicaciones en Realidad Virtual, con las que podemos ver una ópera, visitar las obras de Goya o Velázquez, o estar en un asentamiento de hace miles de años sin levantarnos del sofá, o con la digitalización de exposiciones, estos grandes centros culturales quieren hacer de "la curiosidad el concepto clave, y ahí la tecnología juega un papel decisivo".

Son palabras del director del Museo del Prado, Miguel Falomir, que ha destacado el valor del acuerdo firmado con Samsung para servirse de la tecnología de cara a acercarse a un público más joven y a acercar a todos las centenarias obras que guarda la pinacoteca.

Desde el año 2013, Samsung ha destinado siete millones de euros para digitalizar archivos o convertir en Realidad Virtual los bifaces del Museo Arqueológico y las notas de óperas como La Boheme. "Es una manera de acercarlo a todos", ha valorado el director del Teatro Real, Ignacio García-Belenguer, en un acto en el que también han participado la directora de cine Isabel Coixet, el fotoperiodista Manu Brabo y el director del Museo Arqueológico, Andrés Carretero.

"Es obvio que la cultura no ha sido una prioridad para la sociedad en los últimos años, y que la oferta de las Administraciones Públicas no ha sido destacable. De ahí que estos acuerdos con entidades privadas sean necesarios", ha reconocido Falomir, que pedía "mayor presupuesto" para que las instituciones culturales sigan creciendo.

Fin al mito del aburrimiento

El director del museo más popular de España, con más de tres millones de visitantes anuales, ha reconocido que la pinacoteca ha dado "un tremendo salto adelante en términos tecnológicos, siendo clave para que cada uno diseñe su propia visita cuando viene".

La tecnología no sólo sirve para mejorar la oferta al público, sino también "como elemento de accesibilidad, ya que a través de ella rejuvenecemos el público y eso nos ayuda a crecer. Cada vez viene más gente al teatro", apunta García-Belenguer, que también resalta que "nos ayuda a dar perdurabilidad a montajes que son efímeros en la ópera".

La idea es eliminar el término "aburrido", que viene a la cabeza de una parte de la población cuando piensa en el Museo del Prado o en el Arqueológico, y también hacer desaparecer el concepto de exclusividad que suele acompañar a la ópera.

"No todo el mundo puede ir a la ópera, o acercarse a algún museo, pero sí que pueden acceder a grabaciones o a vídeos a través de una aplicación. La tecnología es un medio para que la cultura crezca y vaya a mejor", ha afirmado la directora de cine Isabel Coixet, que ha colaborado con Samsung para filmar el documental El Espíritu de la Pintura.

Gracias a los acuerdos de estos grandes centros culturales con Samsung, los usuarios pueden disfrutar de toda la colección El Tesoro del Delfín, un grupo de 244 piezas digitalizadas a través de más de 11.000 fotografías, del Museo del Prado, o de óperas como La Boheme en el Palco Virtual del Teatro Real en su propio móvil sin moverse del sofá.