Un año más, y van diez, Fundación Banco Santander y Open Studio Madrid han otorgado el Premio a la Producción Artística. Una distinción que busca dar visibilidad a jóvenes creadores de artes visuales todavía alejados de los circuitos comerciales. En la convocatoria participan artistas españoles o residentes en España de entre 18 años y 36 años que no tengan estudio en Madrid.
En esta última edición, el premio ha recaído en el proyecto Altar a la silla, de la joven artista vasca Andrea Aguilera (Bilbao, 1997). La pieza está centrada fundamentalmente en la fotografía y la performance, y se desarrolla mediante una exhaustiva investigación respecto al material y a lo rígido en relación al cuerpo, a través de una constante búsqueda con el uso de distintos materiales.
El jurado ha destacado cómo el trabajo de Aguilera gira alrededor de la interrelación entre la reflexión y el archivo, enfocando su práctica artística en la fotografía, con permanentes referencias escultóricas. La artista bilbaína “emplea la imagen y la materialidad de ésta como medio para reflejar y analizar gestos, huellas y objetos. A su vez, aprovecha este imaginario para señalar aquello que llama su atención mediante retratos psicológicos y antirretratos, dotando al objeto de significado humano”, señalan los responsables del premio.
El arte de sentarse
Al reflexionar sobre la obra de Andrea Aguilera, un observador perspicaz podría preguntarse si es posible capturar esa instantaneidad en la escultura. Altar a la silla está conformado por una serie de piezas que giran en torno a la silla como objeto cotidiano, así como a los materiales y técnicas empleadas en su producción a lo largo de la historia. Pero la artista tiene también muy en cuenta la performatividad que conlleva el propio acto de sentarse, como si éste fuera la clave para capturar ese instante en un simple esbozo, de un modo análogo al del escultor que realiza un moldeado rápido de su objeto.
La bilbaína ha querido añadir a la experiencia propiamente fotográfica ciertos lenguajes escultóricos para expandir los límites tradicionales del medio. Inspirada por Néstor Basterretxea (1924-2014), Aguilera desarrolla una línea de investigación que incide en la convergencia entre la escultura y la fotografía de modo similar al escultor vizcaíno, explorando la puesta en escena de esculturas, objetos y modelos a través de la fotografía, y teniendo en cuenta los cambios en el volumen y la forma que generan ese contraste entre luces y sombras.
Residencia, producción y acompañamiento
La ganadora obtiene con la distinción una residencia de tres meses en el estudio Espositivo de Madrid, dedicado desde 2015 a la promoción de la creación contemporánea y a contribuir a la difusión de proyectos procedentes del ámbito de las artes visuales. También recibe una dotación económica, 5.800 euros brutos en concepto de bolsa de producción y alojamiento, además del acceso a los recursos técnicos y humanos del taller.
Esta edición aporta como novedad el hecho de que Andrea Aguilera esté acompañada durante la residencia y producción de su obra por la comisaria independiente Beatriz Alonso. Las obras desarrolladas por la artista durante el periodo de residencia, así como los videos divulgativos que se realicen para ilustrar la ejecución de su trabajo, serán difundidos por Open Studio entre profesionales, coleccionistas, prensa especializada y otros agentes culturales.
En esta X Edición, el jurado del Premio ha estado compuesto por María Beguiristain (directora de Arte y Exposiciones de Fundación Banco Santander), Blanca Gómez Mosquete (coordinadora del Premio en Fundación Banco Santander), Tania Pardo (Asesora de Bellas Artes de la CAM y subdirectora del Museo CA2M), Beatriz Alonso (comisaria independiente), dos artistas representantes del estudio Espositivo, Irati Noriza (ganadora del IX Premio a la Producción Artística Fundación Banco Santander) y María Eugenia Álvarez (directora de Open Studio).
El arte, parte esencial de la misión de Fundación Santander
Fundación Banco Santander entiende el arte como una herramienta para comprender el mundo y favorecer el desarrollo individual y la convivencia. Por esta razón, se vuelca en el desarrollo de proyectos expositivos, apoya la educación artística, impulsa el coleccionismo y lleva a cabo diferentes iniciativas dirigidas a promover la producción artística y a apoyar a los creadores contemporáneos.
Además, gestiona la Colección Banco Santander con el firme propósito de difundirla y hacerla accesible. Para ello, organiza actividades en torno a sus piezas y facilita que llegue a tantos lugares como sea posible. A ello se añaden su actividad de investigación y sus labores de conservación de las obras que la componen.
Para la Fundación, una verdadera y útil contribución al arte contemporáneo requiere fomentar su enseñanza y promover un sistema pedagógico donde la creatividad y la experiencia estética cobren fuerza. Por eso mantiene una línea de permanente colaboración con museos e instituciones culturales de prestigio que apuestan por la construcción de conocimiento a través de métodos participativos y del apoyo al individuo activo.
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