El misterio que rodea a la muerte del actor estadounidense Gene Hackman y a su esposa, Betsy Arakawa, parece estar lejos de solucionarse. Tras encontrar ambos cuerpos en su casa de la localidad de Santa Fe, en el estado de Nuevo México (Estados Unidos), la autopsia reveló que Hackman falleció por una enfermedad cardiovascular hipertensiva unida al alzheimer que padecía, una semana después de que su esposa lo hiciera por un síndrome pulmonar de hantavirus, un virus potencialmente mortal transmitido por roedores. De hecho, el forense que realizó la autopsia llegó a precisar la fecha en que falleció Arakawa: el 11 de febrero. No obstante, una reciente investigación al teléfono móvil de la pianista revela que esta llamó tres veces a una clínica médica el 12 de febrero, y que incluso llegó a hablar con ellos.

El doctor Josiah Child, quien dirige la clínica Cludberry Health a la que llamó la fallecida, ha explicado a la BBC que, en un principio, Arakawa había concertado una cita para ese 12 de febrero, pero que la había cancelado dos días antes para cuidar de su marido. Sin embargo, el mismo 12 por la mañana llamó de nuevo para pedir ayuda por unas "molestias relacionadas con cierta congestión", asegura Child, quien incide en que la intérprete "no mencionó ninguna dificultad para respirar, falta de aire o dolor en el pecho". La clínica le dio cita para esa misma tarde, pero Arakawa no llegó a asistir.

Anteriormente, los investigadores habían formalizado que Arakawa falleció el 11 de febrero basándose en sus últimos correos electrónicos y en su visita a una tienda de animales, una farmacia y una tienda de comestibles. Ahora, la fecha de su muerte ha sido desplazada a un día después, mientras que la de Hackman se mantiene fechada en el 18 de febrero, día en el que su marcapasos dejó de funcionar.

Una herencia en disputa

La fecha de la muerte de la pianista resulta crucial para averiguar a quién irán los 80 millones de dólares de herencia de Hackman. Según los documentos del tribunal testamentario, el actor había firmado en 2005 un testamento actualizado en el que dejaba todo su patrimonio a su mujer y viceversa. Esto excluía a los tres hijos que el actor había tenido con su primera esposa, Fay Maltase, de ser los beneficiarios de su fortuna. Pero, en caso de que la muerte de su mujer se produjese antes que la de él, la legislación estadounidense estipula que serán los hijos los herederos de la fortuna, pese haber sido excluidos del testamento.

La escasa relación que el actor mantenía con sus hijos Cristopher (65 años), Elizabeth (62) y Leslie Hackman (58) era conocida por todo el mundillo del espectáculo. Tras el divorcio de sus padres, los tres se distanciaron de Hackman hasta el punto que, tras el fallecimiento de su padre, la menor de los tres admitió no haber hablado con él "desde hacía un par de meses".

Hackman, leyenda de Hollywood especialmente durante la década de los 70, ganó dos premios Oscar por sus papeles en French Connection (1971) y Sin Perdón (1992), convirtiéndose en uno de los intérpretes más versátiles y populares de su generación. Decidió abandonar la actuación en 2004. Ayer, casi un mes después del fallecimiento del actor, el tribunal del estado de Nuevo México bloqueó la publicación de informes de autopsia e imágenes de los cadáveres tanto de Hackman como de Arakawa, así como del interior de su vivienda.