Turandot siempre vuelve y Nessun Dorma siempre vence, no hay más que ver cómo las entradas se van agotando antes de su estreno en Madrid. El Teatro Real acoge la reposición de una de las más exitosas producciones realizadas por el coliseo madrileño. El Teatro Real encargó al director Robert Wilson la puesta en escena de Turandot de Giacomo Puccini (1858-1924) y la producción se diseñó, se construyó, ensayó y estrenó en el Teatro Real en 2018.
Creada en coproducción con el Teatro Nacional de Lituania, la Canadian Opera Company, la Houston Grand Opera y la Opéra national de Paris, esta Turandot se ha representado en todos estos escenarios con tanto éxito que se ya ha estado dos veces en Lituania y en noviembre volverá a la Ópera de París. En Madrid se podrán ver 17 funciones de Turandot, entre los días 3 y 22 de julio.
Turandot es la historia de una despiadada princesa china que impone a sus pretendientes el desafío de responder tres enigmas. Aquellos que no logren hacerlo, enfrentarán la muerte. Calaf, un príncipe extranjero que mantiene su identidad en secreto, acepta el desafío y, contra todo pronóstico, logra resolver los tres acertijos. Sin embargo, Turandot se resiste a entregarse al extranjero y él le propone un nuevo enigma: ella deberá descubrir su nombre antes de que amanezca. Si lo logra, él perderá la vida; en caso contrario, ella deberá casarse con él.
Puccini murió antes de concluir la partitura, una labor que recayó en su discípulo Franco Alfano quien pudo rematarla partiendo de los esbozos y notas dejados por su maestro. El final de Turandot escrito por Alfano es, desde su estreno en 1926, el que se emplea habitualmente, si bien hay otras versiones menos populares. La versión de Wilson es fiel a la escrita por el discípulo de Puccini.
Wilson utiliza siluetas a contraluz, máscaras y movimientos rituales en su representación para revelar la historia de la cruel princesa china. En escena domina el color rojo sobre todos los demás. En la historia original de Las siete princesas, obra del poeta persa del siglo XII, Nezamí Ganyaví, la princesa protagonista era la rusa, “la princesa roja, por eso el rojo que es el color del amor, es el color dominante del montaje”, explicaba el propio Wilson en rueda de prensa.
Quienes no repiten en esta reposición son los intérpretes, hay tres elencos encabezados por Anna Pirozzi, Ewa Plonka y Saioa Hernández como la princesa Turandot; Adam Palka, Liang Li y Fernando Radó como Timur; Jorge de León, Michael Fabiano y Martin Muehle como Calaf, y Salome Jicia, Ruth Iniesta y Miren Urbieta-Vega como Liù.
El peso del aria más famosa
Cada representación de Turandot tiene en la interpretación del Nessun Dorma la clave de su éxito. Algo que en el estreno recae en Jorge de León. "El personaje de Calaf conlleva una responsabilidad tremenda como encargado de una de las arias más famosas de la historia", asegura el tenor. El cantante destaca que Turandot tiene grandes dificultades desde el punto de vista vocal, pero que el personaje de Calaf es un papel corto comparado con otros personajes importantes de la historia de la ópera.
“Cuando fue mi debut me animaban a cantar Turandot y yo siempre decía que no, porque creía ese falso mito de que es un papel para el final de la carrera de un tener, de una voz madura. Pero luego me dije por qué no cantar en plena carrera este papel con una voz sana, con unos agudos bien puestos. De modo que empecé a aceptarlos papeles y esta es mi quinta producción de Turandot”, asegura el tenor.
Las funciones de esta reposición estarán dedicadas a la memoria de Pedro Lavirgen (Bujalance, Córdoba, 31 de julio de 1930 - Madrid, 2 de abril de 2023), uno de los grandes intérpretes del papel de Calaf de su generación. Lavirgen no pudo interpretar en el Teatro Real a los grandes personajes que lo encumbraron porque el apogeo de su brillante carrera transcurrió durante el período en el que el coliseo de la Plaza de Oriente fue sala de conciertos y las óperas se representaban en el vecino Teatro de la Zarzuela.
“Fue uno de los grandes Calaf de su generación. Pedro Lavirgen falleció el pasado 2 de abril a los 92 años. Vamos a dedicarle estas funciones de Turandot”, explicaba el director artístico del Real, Joan Matabosch, durante una de los Enfoques del teatro dedicados a Turandot. En ese mismo encuentro el profesor Ricardo di Cala reprodujo uno de los momentos más esplendorosos de este tenor cuando interpretó a Calaf en una sesión en el teatro de San Carlos de Nápoles en 1972. “Estaba en el ápice de su carrera, en una forma vocal impresionante en una de esas noches en las que te sale todo”. El público reclamó un bis de su interpretación del Nessun Dorma. Una secuencia que, podemos escuchar, bis incluido en YouTube.
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