Vuelve al Teatro Real la conocida ópera de Piotr Ilich Chaikovski (1840-1893), Eugenio Oneguin, una de las más representadas en el mundo, desde hoy hasta el 18 de febrero. El coliseo madrileño recupera la concepción inicial que de ella hizo el compositor ruso basándose la escrita íntegramente en verso por Alexandr Pushkin (1799-1837).

Es la primera ocasión que se monta en España sin compañías invitadas, esta vez es una coproducción del Teatro Real con la Ópera de Oslo y con el Liceo de Barcelona con la dirección musical de Gustavo Jimeno, quien desde el será desde la temporada que viene el director musical del Real.

Joan Matabosch, director artístico del Teatro Real, destaca de la producción que “busca ser fiel a la visión de Chaikovski, una obra íntima y emocional, alejada de la grandilocuencia operística tradicional”. El compositor concibió Eugenio Oneguin no como una ópera tradicional, sino como "escenas líricas", buscando crear algo íntimo y sincero, como apunta el director de escena Christof Loy.

"Chaikovski quería una obra que fuera más allá de la ópera tradicional, algo íntimo, donde lo importante fueran las emociones de los personajes". La obra pone el foco en las emociones humanas y el paso del tiempo, más que en la acción dramática.

El compositor ruso no quería cantantes profesionales ni grandes teatros porque su idea original era componer una ópera íntima y sincera, ha sido su éxito el que la ha llevado a ser representada como una gran ópera.

Plano general con Juan Sancho (Monsieur Triquet) en el centro de la imagen.
Plano general con Juan Sancho (Monsieur Triquet) en el centro de la imagen. | Javier del Real

Chaikovski la estrenó con estudiantes de música en Moscú y buscó una sobriedad que es la que ahora se recupera con la escenografía de Christof Loy. El director ha dividido la obra en dos partes.

"En la primera parte nos centramos en las víctimas de Oneguin, en un ambiente realista y casi cinematográfico. La segunda parte explora el mundo interior de Oneguin de manera más abstracta", explica. Esta división se refleja en la escenografía, con un primer acto realista y un segundo acto con una estancia blanca .

El peso emocional de la ópera recae en la orquestación. "La música de Chaikovski es de una aparente simplicidad, pero con una profundidad emocional extraordinaria” ha afirmado Gimeno, el director musical ha destacado que es una partitura sobre la que el compositor dijo: “Si en un momento dado el público recibiera una ínfima parte de aquello que he sentido componiendo daría por cumplido mi cometido".

El real dará 10 funciones de Eugenio Oneguin, entre el 22 de enero y el 18 de febrero. El reparto lo forman Kristina Mkhitaryan (Tatiana), Iurii Samoilov (Eugenio Oneguin), Bogdan Volkov (Lenski), Victoria Karkacheva (Olga) y Maxim Kuzmin-Karavaev (El príncipe Gremin/Zaretski) en los papeles protagonistas, que actuarán junto al Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real.