Marc, Axel y Jes son tres tipos melenudos a los que te podrías encontrar perfectamente tomando unas cañas por cualquier bar de Barcelona y con los que, muy probablemente, sería muy fácil acabar trabando amistad. Marc es atento y tranquilo, sus grandes ojos oscuros escudriñan con interés y, aunque no tiene ningún problema en llevar la voz cantante, tampoco parece buscar un exceso de protagonismo. Axel puede parecer más serio, pues su rostro amenaza con esconderse entre tanto pelo, pero cuando empieza hablar es fácil darse cuenta de que esa sensación solo forma parte de un carácter reflexivo y modesto. Jes tiene un aire despreocupado que se refleja en lo caótico y divertido de sus rizos, y su mirada manifiesta la curiosidad y agitación de un chiquillo inquieto.
Pero no es Barcelona donde nos encontramos, ni tampoco hay ninguna barra de bar cerca, aunque sí alguna que otra lata de cerveza. Estamos en Madrid, en Marilians, tienda de discos de referencia en la capital, y ellos no son tres tipos cualquiera, son los componentes de Sidonie, una banda que lleva más de 25 años de carrera en este turbulento mundo de idas y venidas que es la industria musical.
Están de promo por la publicación de su undécimo álbum de estudio: 'Marc, Axel y Jes'. Un disco que es toda una declaración de intenciones desde la elección del nombre, diez canciones que resumen, en sus propias palabras, "lo mejor de Sidonie". Una demostración de que la veteranía no tiene porqué estar reñida con la ambición.
Antes de empezar a charlar, han estado haciéndose fotos en la calle y un fan les ha reconocido. Les cuenta que es vecino del barrio y que adora su música, mientas les enseña un tatuaje en el brazo con el título de una de sus canciones, Carreteras infinitas. No es su Barcelona natal, pero aquí son tan queridos como en la Ciudad Condal.
La entrevista empieza con la clásica pregunta de rigor: ¿cómo os sentís en los momentos previos a la publicación del disco?
Poco a poco vamos asimilando que hemos hecho 'Marc, Axel y Jes', que va a ser un clásico del pop español
Marc Ros
Jes: "Mira Marc te va a decir una cosa, pero yo estoy muy feliz de estar aquí en Madrid, con ellos dos, un discazo que nos acabamos de sacar y con conciertos por delante. ¿Nervioso? Cero".
Marc: "¿Sabes cuando tienes muchas ganas de hacer algo y te preguntas a ti mismo: no sé si lo estoy disfrutando? Hay tanto esfuerzo detrás y ha costado tanto hacer este disco, que es abrumador. Puede parecer lo contrario, porque es un álbum sencillo, de media hora, con canciones cortitas, pero hay mucho trabajo detrás. Y ahora, a medida que estamos promocionando el disco y hablamos con vosotros, empezamos a disfrutarlo. Porque nos estáis diciendo cosas muy guapas del disco y poco a poco vamos asimilando que hemos hecho 'Marc, Axel y Jes', que va a ser un clásico del pop español".
Axel: "Estamos recibiendo tantos elogios y los periodistas nos están diciendo cosas tan bonitas que me estoy empezando a relajar y a disfrutar de este momento. Porque está marcado por los nervios, el deseo de gustar y de que vaya bien. Al escucharlo, se está percibiendo la mejor versión de Sidonie, y es que es el disco más Sidonie de Sidonie. Se ha conseguido que sea directo, recto y aparentemente sencillo".
Hablamos de lo difícil que es encontrar esa sencillez en la que poder reflejarnos tal y como somos. Marc retoma la palabra y asegura que la clave está en la experiencia. "Ya lo decía Jorge Luis Borges, que cuesta muchos años acabar siendo simple. Entonces en el pop pasa lo mismo, cuando empiezas eres muy barroco, te escondes detrás de muchas metáforas musicales y también en las letras. Cuando coges confianza y aprendes el noble arte de hacer discos, pues acabas haciendo esto, que es ir al núcleo. Contar una historia y que no haya nada entre tú y yo, que la escuches y la puedas cantar para hacerla tuya. Creo que este disco ha conseguido esto", afirma orgulloso el cantante.
Las nuevas generaciones también son influencia
A pesar de haber madurado, Sidonie no ha perdido de vista el presente y no tiene ningún miedo en reconocer su admiración por los nuevos grupos que están surgiendo y calificarlos como influencias. Su último disco, de hecho, está indudablemente marcado por el regreso de las bandas de guitarras. Una tendencia que está en el ambiente y de la que, según Marc, debería hablarse más. "Molaría que se enterara toda España y que se hablara más de ello, que hubiera más programas de televisión pública, donde puedan salir todas esas bandas".
Parte de esta relación intergeneracional viene de la superación de una serie de complejos previos en los que el indie español de principios de los 2000 no interesaba tanto.
Nosotros venimos del 97, 98 y parece que en aquella época, la sensación entre los grupos era que nos mirábamos en plan: 'oye estos quienes son'.
Jes Senra
Marc: "Lo bueno es que hay un salto, porque hay una generación intermedia que no escuchaba Sidonie, o que les parecía poco cool o interesante. Y esta nueva generación viene con otras historias, seguramente tengan otros complejos y prejuicios, pero con nosotros no. No sé, estamos ahí, en su vida, nos han visto en directo, han escuchado nuestras canciones y se nota.
Jes: "Es lo que te sorprende, que luego te vengan y te digan: 'hostia, pero si a mí me encanta Sidonie, o forma parte de nuestra música'. Nosotros venimos del 97, 98 y parece que en aquella época, la sensación entre los grupos era que nos mirábamos en plan: 'oye estos quienes son'. No había tanta comunicación o tanta relación. Nosotros éramos súper abiertos y queríamos conocer a todo el mundo, ser amigos de aquellos y de los otros. Nosotros queríamos entrar en el mundo de todos y hoy en día es así, súper abierto, hay muy buena relación, tenemos muy buenos amigos, casi todos vamos".
Axel. "Lo bonito en nuestro caso, no es solo pensar la admiración que puedan sentir, si la sienten, o todo lo que dicen que pueden aprender de nosotros. Para nosotros lo más importante es todo lo que nosotros podemos aprender de ellos, igual que aprendemos de las lecciones que nos dan los Rolling Stones, siendo un grupo octogenario. Esto es lo maravilloso y lo que creo que tiene este grupo, somos capaces ver y admirar lo que están haciendo los Rolling y también de aprender de lo que están haciendo La Paloma, Niña Polaca, Cometa o Cariño".
El mundo paralelo del streaming
En paralelo a la escena de grupos que tratan de hacerse hueco tocando en salas y festivales, también hay otro mundo que se cuenta en escuchas y reproducciones. Les pregunto por su opinión acerca del último fenómeno viral de Íñigo Quintero.
Marc: "Nosotros vivimos un fenómeno viral muy bestia con una broma queja que hicimos en un avión. Cuando te viralizan es una cosa muy curiosa, porque parece que no está en tus manos, es algo tan bestia que no está a escala humana. Yo no sé cómo lo estará viviendo el chaval, espero que bien y espero que esto sea su futuro en el mundo de la música y que lo disfrute. Pero me parece muy raro, ahora que estamos en una tienda de discos, me gusta pensar que nosotros trabajamos para que nuestro disco esté en esta tienda. Más allá de eso, tío a mí me parece todo cosa de ceros y unos, de algoritmos que me alejan de mi persona como amante de la música".
La nostalgia es una ficción
Aun así, Sidonie no es una banda que busque vivir del pasado, afirman estar muy atentos a todo lo que se está haciendo y conservan la ambición de formar parte del presente. Sin mirar por encima del hombro a los más jóvenes y sin la intención de quedarse a vivir de glorias pasadas.
¿Cuántas bandas de nuestra generación están haciendo el mismo disco una y otra vez?
Marc Ros
Marc: Cuando estaba escribiendo las canciones para 'Marc, Axel y Jes' pensaba: 'Ojo cuidado, ¿pero cuántos años tengo? ¿Y cuántas bandas de nuestra generación están haciendo el mismo disco una y otra vez?'. Todo me suena igual, no hay riesgo, no hay ventura. Por eso pienso que este disco es muy valiente, no es un disco de un grupo de 50 años. Nosotros podríamos vivir de obras pasadas, seguir haciendo festivales y vivir de Fascinado hasta el fin de los días, pero vale la pena esforzarse para hacer las mejores canciones, por eso la emoción, los nervios y la ansiedad. Aún lo miro con mucho respeto, me da cosa tocarlo, está quemando y más que va a quemar cuando lo vivamos en directo".
Aun así, reconocen que la nostalgia es una parte importante del proceso creativo, pero que es tan importante como recordar que está basada en algo que no existe. "Tu juventud no fue tan preciosa, ni la relación con esa persona que has perdido tampoco fue la hostia, cuidado que la nostalgia es ficción. Cuidado, que tu pasado no es como tú lo crees, eso no existe", insiste Marc.
Highlights de una carrera de 25 años
La conversación, sin embargo, sí que se pone algo nostálgica al final, cuando les pregunto por lo que ellos considerarían los highlights de una carrera con once discos, colaboraciones con el mismísimo Joan Manuel Serrat o como teloneros de los Rolling Stones en el Metropolitano. Ninguno de estos temas aparece sobre la mesa. Por el contrario, no dudan en hacerle un hueco a 'Marc, Axel y Jes' y a todos esos momentos en los que la amistad y las ganas de hacer música estuvieron presentes.
Marc: "Es buena idea lo de meter este álbum como un highlight. Es como cuando estamos en alguna fiesta o un evento y de repente nos quedamos los tres solos, nos vamos a cenar por ahí y nos hacemos un homenaje, con su vino, con su comida excelente y su copa después. Creo que este disco va un poco en esa línea. Es nuestra cena privada, que realmente se puede compartir, la gente nos puede acompañar en los gin tonics, pero me parece una cosa íntima, nuestra y por eso se llama así. Es un momento en que te dejan solo y estamos los tres hablando de lo que nos ha pasado en la vida".
Jes: "Es un momento muy bonito. Por otro lado, me viene a la memoria un día en Galicia, un concierto y una superfiesta. Acabamos los tres en el hotel. Recordáis que nos fuimos al bar los tres. a tomar una cerveza, yo estaba pasando un momento raro y sentir el cariño de los dos, que éramos una piña... Para mí ese sería un buen highlight, me has hecho pensar en ese momento".
Axel: Para mí un highlight se traduce en una visión, una visión real eh, que tuve la tarde que vino Jes a ensayar con nosotros por primera vez. Había visto a Jes antes, lo conocía de la noche barcelonesa, pero nunca había hablado con él. Marc había ido a recogerle a él y luego a mí. Recuerdo perfectamente ese momento de salir de casa y verlos a ellos dos hablando al lado del coche de Marc, y después saliendo para allá a tocar a ver qué pasaba. Tengo muy grabado ese momento de pasar y verlos hablando. Aquello ocurrió en el garaje de casa de mis padres y cada vez que vuelvo y hago el mismo recorrido, me acuerdo de ellos allí, porque ese momento, segundos antes de que yo me reuniera y conociera a Jes, fue el comienzo de todo hace 26 años. Y es que sin ese momento no puedo explicar todo lo que ha pasado".
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