Adrián Lastra, Chema del Barco, Canco Rodríguez, Juan Antonio Lumbreras, Rocío Calvo y Candela Serrat protagonizan el espectáculo que da comienzo este 8 de octubre en el Teatro Marquina con funciones de miércoles a domingo, ofreciendo doble sesión los sábados.

Privacidad pretende hacer reflexionar al público sobre la falta de confidencialidad a la cual estamos sometidos hoy en día; ya que no somos conscientes de que información nuestra, privada, es usada sin previo aviso por corporaciones y gobiernos.

James Graham y Josie Rourke idearon esta obra basada en varias entrevistas que se llevaron a cabo a académicos, legisladores, CEO’s e historiadores de diferentes empresas. Creando una representación de lo más completa; tratando temas como el poder de la tecnología, el temor al ciber espionaje gubernamental o la digitalización de la sociedad. Todo esto es Privacidad.

Cuándo la obra se estrenaba por primera vez en el Donmar Warehouse Theatre de Londres en el año 2014, ni los autores imaginaban el impacto que iba a tener entre los asistentes, consiguiendo un éxito inaudito. Tras su paso por la capital inglesa, en 2016 se presentaba, con una versión actualizada y adaptada por los autores, en el Public Theatre de Nueva York con Daniel Radcliffe, actor protagonista de Harry Potter, en el papel principal. Por su parte, la primera versión en español llegaría de la mano del director Fran Franco en México.

El espectáculo llega a Madrid gracias a la productora LETSGO que el pasado mes de septiembre recibía el galardón “Innovación y sostenibilidad” que otorga el Ayuntamiento de Madrid con motivo del Día Mundial del Turismo. La promotora es responsable de espectáculos de primer nivel como Ghost, La Familia Addams o Dirty Dancing entre otros.

Hablamos de una obra que intenta concienciar al público sobre el uso e impacto que tienen las redes sociales en nuestro día a día. Su director, Esteve Ferrer, nos atiende para El Independiente:

Pregunta.- ¿Qué se va a encontrar el público que acuda al teatro a ver Privacidad?

Respuesta.- Una mirada diferente al mundo de las interacciones sociales de hoy en día a través de un espectáculo distinto que sorprende, divierte y reflexiona a partes iguales.

P.- Ya habéis presentado la obra en otros puntos de España, ¿Cómo ha sido la respuesta del público?

R.- La acogida ha sido estupenda, más de lo esperado porque sabíamos que el tema no era de por si fácil. Confiábamos en que el boca oreja haría su trabajo, pero este se ha producido a la velocidad de la luz.

Esteve Ferrer, director del espectáculo. Academia de las Artes Escénicas de España

P.- Adrián Lastra, Canco Rodríguez, Rocío Calvo, un elenco de lujo. ¿Cómo es trabajar con todos ellos?

R.- Fácil y productivo. Es un texto muy complicado con unos personajes que requieren de un gran dominio del oficio para darles entidad dramática. Me han dado lo que les he pedido con absoluta generosidad y el público lo celebrará.

P.- ¿Crees que en los tiempos que corren se puede vivir sin estar conectado a la red?

R.- Por supuesto, siempre que estés dispuesto a huir y recluirte en el rincón más deshabitado del mundo, pero ¿quién tiene el valor para hacerlo? Yo desde luego, no.

P.- Informes aseguran que hay cerca de 4,5 mil millones de personas activos en las redes sociales en todo el mundo, traducido son el 53,6% de la población global, ¿Crees que son tan imprescindibles como para que tantos usuarios las utilicen?

R.- Nada es imprescindible, pero son más los beneficios que los perjuicios. La equidad, como en todo, está en el uso que hagas de ellas. No hay que olvidarse que son herramientas para tener una vida mejor, nunca para poder tener una vida.

Hay que ser vigilantes con nuestra privacidad y tener filtros adecuados para discernir la verdad de la mentira"

esteve ferrer, director de la obra

P.- ¿Son las redes sociales tan peligrosas como se dice?

R.- Me remito a lo dicho anteriormente, nada es peligroso, lo realmente peligroso es el uso que alguien pueda hacer de ellas. Todos estamos expuestos continuamente a ser vulnerados, a ser manipulados y utilizados y por eso pienso que es muy necesario hacer este tipo de reflexiones. Hay que estar vigilantes con nuestra privacidad y tener los filtros adecuados para discernir la verdad de la mentira.

P.- Hablemos de ti, ¿Quién es Esteve Ferrer?

R.- Un apasionado y enamorado de su oficio. Actor, director, cantante, dramaturgo, en definitiva, un inquieto de la vida que desde hace tiempo descubrió que ayudar a contar historias era lo mejor que sabía hacer y lo mejor que podía ofrecer a sus conciudadanos.

P.- Has trabajado en muchos géneros, pero ¿cuál es tu predilecto para dirigir?

R.- Me siento cómodo en todos los géneros, precisamente porque no abuso de ellos e intento saltar de uno a otro para seguir aprendiendo. He disfrutado tanto montando musicales como poniendo en pie dramas, tragedias, comedias, cabaret, magia e incluso danza. El único condicionante es tener una buena historia que contar y cada historia pide una manera diferente para ser contada de la mejor manera posible.

P.- ¿Cómo ha sido para ti trabajar en esta representación? ¿Hay mucha presión por dirigir la versión de una obra que ha tenido tanto éxito en otros países?

R.- En absoluto, la obra no solo permite hacerte con ella a tu manera, exige ser coautor porque demanda ser actualizada continuamente y con la mirada del que la versiona. La intención de los autores originales fue crear un texto vivo, que permitiese evolucionarlo al ritmo de lo que pretende analizar, la expansión tecnológica del siglo XXI.

Creo que cada vez que alguien abría un libro, escuchaba música, veía una película o acudía al teatro con todas las restricciones, su alma se regeneraba un poco del dolor sufrido"

P.- Por fin podemos decir que se vuelve a los teatros con algo de “normalidad”. ¿Cómo habéis vivido en el sector la crisis del coronavirus?

R.- Como hemos podido, en muchos casos reinventándonos y demostrando que la cultura era un bien de primera necesidad. Creo que cada vez que alguien abría un libro, escuchaba música, veía una película o acudía al teatro con todas las restricciones, su alma se regeneraba un poco del dolor sufrido.

P.- ¿Cuánto de importante consideras que es acudir al teatro?

R.- Para desconectarte, para estimularte, para divertirte, para llorar, para emocionarte, para socializar. Leí una vez un estudio que decía que las personas que asistían con cierta asiduidad a acontecimientos relacionados con la cultura se sentían mucho más felices y esto aumentaba su calidad de vida.