Pobreza farmacéutica: las medicinas no están al alcance de todos

Cuando el farmacéutico Valentín de Grado llama a alguno de sus clientes para decirle que ya ha llegado el pedido de su medicación, hay quien le responde “gracias, me pasaré a primeros de mes”. Él sabe que entre estas personas, que suelen estar por encima de los cincuenta y entre las que se encuentran muchas mujeres divorciadas con hijos a su cargo, hay víctimas de pobreza farmacéutica.

Con la receta electrónica es posible saber quién no puede retirar su medicación

En España hay dos millones de personas que tienen serios problemas para comprar todos los medicamentos que el médico les receta, dos millones de personas cuya situación económica pone en riesgo su salud, es decir, que sufren pobreza farmacéutica. Una cifra que ha calculado la ONG Banco Farmacéutico con motivo de la undécima campaña que ponen en marcha este sábado para tratar de paliar esta situación.

"Antes era complicado saber cuántas personas tenían problemas para comprar sus medicinas, pero desde que se instauró la receta electrónica cualquier médico con interés puede ver si su paciente ha dejado de comprar el medicamento y preguntarle por qué", explica de Grado, vicepresidente de la ONG.

Una tarjeta con seis meses de medicinas

Banco Farmacéutico lleva desde 2015 trabajando en Barcelona con un sistema que garantiza que las medicinas van a quien las necesita. Cuando un médico de familia comprueba que un paciente no ha retirado una receta, le pregunta y lo comunica al trabajador social del centro. Tras un análisis se comprueba si esa persona tiene problemas económicos y en caso necesario se le da una tarjeta con la que puede adquirir sus medicamentos gratis durante seis meses en cualquiera de las farmacias que forman parte de la red. "Suelen ser personas con enfermedades crónicas que tienen que tomar antiasmáticos, antidepresivos, antialérgicos... aunque los fármacos son muy variados. Y el 11% son niños", explica De Grado.

España gastó en 2016 9.912 millones de euros en medicamentos, un 18% del gasto sanitario total y el 1,6% del PIB. Una cifra que está lejos del récord de 12.721 millones de euros de 2010 y que no está cubriendo las necesidades de medicinas de toda la población, según Banco Farmacéutico.

En España hay distintos regímenes de copago de medicamentos, desde la subvención total que tienen los beneficiarios de pensiones mínimas y no contributivas al 60% que pagan las rentas mayores de 100.000 euros, con un tope de 60€ para los pensionistas. Los jubilados con menos de 18.000 euros anuales de pensión tienen un tope mensual de 8,60€ y los que cobran entre esta cantidad y 100.000 euros, de 18,59€ al mes. Entre los trabajadores, el copago farmacéutico es del 50% (hasta 2012 era del 40%) hasta los 100.000.

En España hay distintos regímenes de copago, desde la subvención total al 60%

"El régimen de copago se revisa cada año, por eso muchos de nuestros beneficiarios son personas a las que se le termina la prestación de desempleo o les cambia la situación y durante unos meses su situación no está acorde con lo que tienen que pagar. También hay muchas mujeres divorciadas con hijos a su cargo a las que su ex marido no les paga la pensión y no pueden acceder a los medicamentos de sus hijos, por ejemplo a las vacunas antialergia, que son muy caras", cuenta De Grado. De hecho, según explica la ONG, el 94% de sus beneficiarios están en el régimen de copago del 40% del precio del medicamento.

Dos millones de personas en toda España

Durante estos más de dos años de actividad en Barcelona, Banco Farmacéutico ha ayudado a 3.000 personas con 340.000 euros de desembolso. Esos datos les han servido también para calcular que este problema lo están sufriendo en España dos millones de personas. "Tenemos una persona que ha realizado un cálculo geolocalizado de los beneficiarios y los ha puesto en relación a las personas que sufren pobreza energética, en función de ello ha resultado el cálculo de dos millones de personas", aclara De Grado.

Recogida de medicamentos durante la campaña de Banco Farmacéutico en años anteriores. Banco Farmacéutico

Por ello el objetivo de Banco Farmacéutico este 2018 es trasladar el programa a nueve provincias más en las que ya tienen muy avanzados los acuerdos con la Administración y las farmacias para poner en marcha el proyecto. "Es complejo, porque hay temas de protección de datos y se necesita mucha coordinación, pero este año esperamos poder poner en marcha el programa en Madrid, Gerona, Granada, Zaragoza, Lérida, Málaga, Tarragona, Huesca y Teruel", afirma el vicepresidente de la ONG.

Así, la ONG, que desde hace una década realiza una campaña anual de recogida de medicamentos - que entregaba a entidades sociales en distintas provincias -, ha dado un giro a su campaña y lleva este sábado 10 de marzo la campaña a las farmacias de las 10 provincias donde prevé comenzar a trabajar este año. "Este sábado estaremos en las farmacias con voluntarios que ofrecerán cupones de 2,5 euros cada uno. Todo lo que recojamos en esa provincia irá a pagar a esa provincia", explica De Grado. La campaña se realizará en 600 farmacias y continuará durante la semana siguiente.