Es uno de los aspectos del Covid que deja aún más incógnitas por resolver. El Covid persistente empezó a observarse pocos meses después del inicio de la pandemia pero no ha sido hasta este pasado diciembre cuando la Organización Mundial de la Salud ha logrado alcanzar un consenso para definirlo: "Es la condición que ocurre en individuos con antecedentes de infección probable o confirmada por SARS-CoV-2, generalmente tres meses después del inicio, con síntomas que duran al menos dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo". La OMS indica que los síntomas pueden aparecer tras la recuperación inicial o persistir desde la enfermedad inicial. Además, pueden fluctuar o recaer con el tiempo.
Algunos casos son realmente graves e imposibilitan a quienes lo sufren a llevar una vida normal. En otros casos, la mayoría, son leves aunque también limitantes y el desconocimiento y la amplitud de síntomas dejan a veces a los pacientes sin una correcta asistencia.
En total, se han llegado a catalogar más de 200 síntomas pero una nueva guía para el tratamiento de pacientes de Covid persistente establece algunos más frecuentes agrupados en 11 categorías. Algunos están más asociados a la enfermedad, como la tos y la fatiga, pero otros son tan variados como las flatulencias, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC), los acúfenos (pitido persistente en el oído) o la diplopía (visión doble).
Ahora, farmacéuticos, médicos de Atención Primaria, enfermeras, psicólogos y pacientes han participado en la elaboración de un informe para la atención de casos no graves que se ha presentado este martes impulsada por la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp). En él clasifican en 11 grupos los síntomas del Covid persistente leve.
11 grupos de síntomas de Covid persistente
- Cardíacos, como son palpitaciones, hipotensión ortostática, hipertensión arterial, síncope, taquicardia, bradicardia sinusal…
- Problemas de coagulación, que pueden incluir hematomas, microtrombosis, acras…
- Dermatológicos, como la urticaria, rash, alopecia…
- Trastornos digestivos, como la abdominalgia, dispepsia, pirosis, flatulencia, diarrea…
- Síntomas generales, como febrícula, escalofríos, anorexia, malestar general…
- Trastornos neurológicos, entre los que caben la cefalea, parestesias, anosmia/cacosmia, disgeusia, dispraxia, déficit de memoria, inestabilidad, mareo, incapacidad para concentrarse…
- Síntomas oftalmológicos, como la diplopía, nistagmus, visión borrosa y ojo seco
- Síntomas osteomusculares, que pueden ser artralgias y mialgias, calambres musculares…
- Problemas otorrinolaringólogos; odinofagia/disfagia, disfonía, aftas bucales, acúfenos o hipoacusia.
- Síntomas psicológicos, como la ansiedad, fobias, apatía, trastornos del sueño, trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)…
- Síntomas respiratorios, los más comunes disnea, tos seca, opresión torácica…
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