Las altas temperaturas traen, inevitablemente, la visita de molestos insectos, como los mosquitos. Tanto en nuestras salidas al campo o a la playa como en casa, es fácil sufrir sus acometidas y picaduras, donde pueden acarrear importantes granos, puritos e hinchazones indeseadas.
Para evitarlos, y todo de una manera provechosa y beneficiosa para todos los integrantes de la familia, es verdad que hay diferentes soluciones muy bien vistas y eficaces. Desde las que son pegatinas o pulseras y geles, pero también hay consejos muy prácticos que podemos aplicar.
Hablamos de un insecto que, además de molesto, es también peligroso, ya que puede transmitir numerosas enfermedades.
Las más comunes son el mosquito común (Culex pipiens), que transmite la fiebre del Nilo, y el mosquito tigre (Aedes albopictus), que puede transmitir la malaria, la fiebre amarilla, el virus del dengue y el del zika. Aunque este insecto es originario de Asia, en los últimos años ha invadido Europa y el Mediterráneo.
Estos insectos, que prosperan en climas cálidos, pueden fastidiarnos bastante, aunque hay formas de disuadirlos. Ahora bien, ¿de qué familia son los mosquitos y por qué molestan tanto en verano?
¿Por qué hay tantos mosquitos en verano?
Y es que, en función del índice de lluvias de primavera, las altas temperaturas u otros factores, podemos ver este insecto con más o menos frecuencia. En el hábitat que se sienten más cómodos es en entornos cálidos y húmedos.
Las zonas de España más expuestas a las poblaciones de mosquitos son, principalmente la zona del Delta del Ebro y las marismas del Guadalquivir, concretamente, los pueblos de Sevilla. Entre los que hay que recalcar Isla Mayor y la Puebla del Río, en los que existen grandes terrenos de arrozales y sufren la invasión de los mosquitos con la llegada de las altas temperaturas.
Estos pequeños insectos pican a humanos y otros animales
Hablamos de los que son pequeños insectos voladores que pican tanto a nosotros, los humanos, como también a otros animales. Hay muchas especies de mosquitos con diferentes preferencias en clima y territorio de reproducción. Normalmente, los mosquitos ponen sus huevos en aguas estancadas.
Las larvas de los mosquitos salen de los huevos y permanecen en el agua, alimentándose de pequeños organismos. Una vez que maduran, los mosquitos adultos salen del agua para buscar sangre y reproducirse.
Por qué nos pican los mosquitos (siempre a mí)
Está claro que hay personas a las que los mosquitos, y los insectos en general, pican con más facilidad. Dentro de una misma familia es frecuente que haya un miembro que acapare la práctica totalidad de las picaduras mientras el resto sufra estas molestias solo de forma ocasional.
Alrededor de esta atracción de los mosquitos, tan aparentemente selectiva, se ha dicho de todo, como por ejemplo que si te pican mucho es que tienes la sangre dulce… pero nada de eso. Algunas razones (reales) que hacen que los mosquitos se sientan irresistiblemente atraídos por ciertas personas son los siguientes.
- El tipo de sangre. A los mosquitos les atrae más el tipo de sangre 0 que la de tipo A.
- El alcohol. Si consumes bebidas alcohólicas tienes más posibilidades de acabar con una o más picaduras, y si se trata de cerveza, la atracción de los mosquitos es todavía más fuerte.
- El sudor. Lejos de repeler a los mosquitos, este olor les atrae de forma muy intensa. Así que si realizas actividades físicas al aire libre, tienes todas las papeletas de que te piquen a ti antes que a otras personas, y más aún si sales alrededor de las horas del atardecer.
- Las embarazadas. Son las más propensas a sufrir las picaduras de los mosquitos. Esto se debe a que los cambios hormonales que se producen en el organismo originan un tipo de sudor, cuyo olor resulta extremadamente seductor para los mosquitos.
Qué hacer para disiparlos
Los expertos coinciden en que la mejor arma de aquellos que sufren la persecución de estos insectos es un buen repelente. Lo mejor es adquirirlos en tiendas especializadas o en farmacias y seguir los consejos del etiquetado.
Hay que tener en cuenta que su efecto depende del olor personal, por lo que debemos identificar cuánto atraemos a los mosquitos para utilizar un producto de mayor o menor graduación. Asimismo, y además del uso de repelentes, cabe hacer mención de algunas prácticas que nos sentirán muy bien para disiparlos.
- Utilizar repelentes de mosquitos con DEET (Dietiltoluamida), Icaridina, IR3535 o Citriodiol sobre la piel que queda expuesta.
- Huye de la luz. Si tienes la ventana abierta, procura dejar la luz apagada, ya que los mosquitos acuden a la luz.
- Elimina objetos y recipientes que junten agua. Grandes y pequeños, dentro de la casa y en patios, fondos, balcones y terrazas. Desde latas, botellas abiertas o trozos de plástico.
- Utiliza mosquiteras. Puedes ponerlas en la cama o cuna, fijándolas bajo el colchón y asegurándote de que no estén rotas, porque constituyen una barrera física de alta eficacia contra los insectos, que atacan por la noche. También pueden colocarse en ventanas y puertas y, para mejorar la protección, pueden impregnarse con permetrina o deltametrina. Si viajas a países tropicales, llévalas contigo.
- Es conveniente utilizar el aire acondicionado siempre que sea posible porque hace más difícil que haya mosquitos.
- Evita las zonas donde tienen sus nidos: cubos de basura, balsas con agua, comidas y dulces sin tapar y jardines en flor. Así mismo, procura no molestar a los insectos.
- Si es posible, evita usar ropa que cubra la piel: manga larga, pantalones largos y calcetines, así como evitar los colores oscuros y brillantes, que atraen a los mosquitos. Y no olvides sacudir la ropa antes de usarla si la has tendido en el exterior.
El uso de la cintronela
En el mercado, como mencionamos al principio, exisen numerosos producos como pulseras antimosquitos, geles y otros tanos que pueden funcionar (no simpre) para evitar que estos insectos nos persigan y nos llenen de picaduras cometidas por sus picotazos.
Asimismo, hay soluciones totalmente naturales que pueden sernos de mucha ayuda. Hablamos de la cintronela, con el que muchos repelentes esttán compuestos. Hablamos de la citronella o citronela como una planta aromática conocida por ser un repelente natural de mosquitos y otros insectos. Su efecto antimosquito funciona, especialmente si nos impregnamos la piel y ropa con el producto, por lo que las pulseras o parches suelen ofrecer una protección más limitada.
Además, esta misma planta tiene muchas propiedades que hacen que sea una planta muy apreciada tanto en perfumería, en aromaterapia o como de insecticida natural.
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