La Consejería de Salud del Principado de Asturias ha detectado el primer brote de coronavirus que se produce desde finales de febrero en una residencia de personas mayores, ubicada en Langreo, que ha afectado a ocho residentes. El servicio de Epidemiología del Principado investiga ahora las causas del brote, ya que todos los internos, incluido el personal, habían recibido ya las dos dosis de la vacuna de Pfizer.

Éste ha sido el primer brote en una residencia de mayores de Asturias en más de 40 días y una vez culminado el proceso de vacunación entre los trabajadores y usuarios de los 270 centros de mayores que hay repartidos por toda la comunidad, de los que el 96 por ciento ya ha completado la pauta de las dos dosis. Uno de los contagiados en este nuevo brote ha requerido ingreso hospitalario, mientras que el resto están asintomáticos.

A pesar del nuevo brote, el Gobierno del Principado de Asturias flexibilizará las visitas, salidas e ingresos de nuevos usuarios en la red de geriátricos a partir del 9 de abril. Según la consejera de Bienestar Social y Derechos Sociales, la vacunación abre una puerta a la esperanza para devolver cierta normalidad a la vida de las personas que viven en estos centros que, en función de las características de cada uno, contarán con distintos planes de contingencia.