Uno de los proyectos más prometedores de una vacuna intranasal frente al Covid se desarrolla desde 2020 en el Centro Nacional de Biotecnología del CSIC y de la mano de uno de los mayores expertos en coronavirus, el virólogo Luis Enjuanes. En conversación telefónica con El Independiente, el experto explica cómo va su proyecto, una fármaco en spray basaoa en un replicón de ARN que hasta el momento ha mostrado resultados de eficacia del 100%.

“Hemos hecho la prueba de principio, estamos haciendo experimentos en modelos animales y ahora hemos entrado en una fase de escalado, de producción en mayor cantidad y adaptación a las normas GMP [buenas prácticas de fabricación, por sus siglas en inglés] que se exigen para el momento de los ensayos clínicos", explica el investigador, una fase en la que necesitan de colaboración más allá de los laboratorios del CSIC.

Una colaboración que están cerrando con una compañía de la que Enjuanes prefiere aún no dar el nombre: “No me gusta lanzar campanas al vuelo, se trata de una farmacéutica española dedicada a fabricar vacunas. Tiene gran experiencia en salud animal y desde hace tiempo se dedica también a salud humana. Es una compañía muy moderna con la capacidad de producción y de desarrollo que nosotros no tenemos”.

Y es que ahora el proyecto que dirigen Luis Enjuanes y la viróloga Isabel Solá requiere de aumentar los rendimientos de producción y adaptarse a la normativa requerida. “Lo nuestro es muy original y prometedor pero precisamente por esa originalidad que tiene tenemos que comprobar muchas cosas y ahora tenemos que pasar por esa otra fase de desarrollo y de aumentar rendimientos”.

En paralelo a este trabajo, el proyecto de Enjuanes aún tiene que conseguir también la fórmula para hacer los ensayos en monos macacos, la última parte de los ensayos preclínicos. “Tenemos dónde podríamos hacerlo pero con un coste muy elevado. Estamos en ello…”, explica sin esconder que se trata de un problema económico. “La fase de experimentación animal es muy compleja y requiere una alta financiación por parte del Gobierno y por parte de una multinacional. Esto en este momento no es fácil, esa negociación no está hecha. Hemos hablado, pero eso lo veremos cuando concluyamos las pruebas experimentales en los macacos”.

Así, conseguir hacer realidad este proyecto de vacuna ha llegado a una fase en la que la responsabilidad cae ya fuera del laboratorio de Enjuanes. “Lo que viene a continuación no está solo en nuestras manos, sino de otras compañías, decisiones políticas y cómo continúe la pandemia”.

Aunque su proyecto aún no vea un final dos años y medio después del inicio del brote en China, Enjuanes confía en la utilidad de proyectos como el suyo. “Si la pandemia se va resolviendo no será fácil, pero aún alguien tiene que sacar una vacuna que dé una inmunidad esterilizante, que las personas inmunizadas no se infecten”.

En este sentido y tal como plantean los científicos en el reciente editorial de Science, una vacuna intranasal sería la más idónea para frenar los contagios. “Hay que dar inmunidad en mucosas respiratorias que es por donde entra el virus y esto no se da con pinchazos intramusculares. Esto se tiene que hacer administrando con algún método intranasal para vacunar en el sitio, en el tracto respiratorio”.

Si bien esta mayor efectividad de la inmunidad intranasal era conocida, Enjuanes explica que “no se ha hecho porque los permisos para esa ruta de administración cuestan mucho más trabajo”. Pero explica que otras vacunas en el mercado, como la de AstraZeneca, está ya probando su vacuna Covid en administración intranasal (en ensayos clínicos) y que “esto hará posiblemente que las vacunas que ya teníamos administradas por ruta intranasal serán muchísimo más efectivas”. El investigador cree que esto se podrá ver ya en pocos meses: “Este otoño esperamos mejoras en las vacunas que pueden ser clave para la evolución de la pandemia”