Científicos contra la leche de fórmula para bebés: propiedades falsas, peor nutrición y feminismo engañoso

Los bebés no están siendo alimentados de la mejor manera posible, la que recomienda la OMS y que en España el Comité de Lactancia de la Asociación Española de Pediatría específica en: “La alimentación exclusiva al pecho durante los primeros 6 meses de vida del niño y continuar con el amamantamiento junto con otros alimentos que complementen la alimentación hasta los 2 años o más, mientras madre e hijo lo deseen”.

Menos de la mitad de los niños del mundo sigue esta alimentación. Las razones son múltiples: condicionamientos sociales de género, desigualdades políticas gubernamentales erróneas. Una serie de artículos publicados por la revista científica The Lancet denuncia esta situación y apunta directamente a estrategias de marketing engañosas y uso de influencers por parte de las empresas de leche de fórmula. 

La industria utiliza ciencia deficiente para sugerir que sus productos son soluciones para la salud infantil

Linda Richter, Universidad de Witwatersrand

Según las recomendaciones de The Lancet la responsabilidad de la buena alimentación de los niños no debe recaer solo en las madres sino en la sociedad que debe facilitar condiciones para que se produzca la alimentación adecuada. En el mundo hay 650 millones de mujeres sin protección alguna para la maternidad, según la prestigiosa publicación médica. 

“Los bebés tienen más probabilidades de sobrevivir y desarrollar todo su potencial cuando son amamantados. La lactancia materna promueve el desarrollo del cerebro, protege a los bebés contra la desnutrición, las enfermedades infecciosas y la muerte, al mismo tiempo que reduce los riesgos de obesidad y enfermedades crónicas en el futuro. Sin embargo, en todo el mundo, muchas mujeres que desean amamantar se enfrentan a múltiples obstáculos, como licencias parentales insuficientes y falta de apoyo en los sistemas de salud y en el lugar de trabajo, en el contexto de las tácticas de marketing de explotación de la industria de fórmulas lácteas comerciales”, asegura Rafael Pérez-Escamilla coautor de la serie y profesor de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale (EEUU).

The baby Killer

La OMS desarrolló el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna en 1981 motivada por una importante campaña de la ONG War on want que publicó la investigación The Baby Killer sobre la comercialización de leche de fórmula de Nestlé en países de ingresos bajos y medianos en la década de 1970. 

The Lancet ha revisado 153 estudios que detallan cómo las prácticas de marketing que violan el Código han continuado en casi 100 países y en todas las regiones del mundo. Según The Lancet la aceptación voluntaria del Código no es suficiente y exige un tratado legal internacional sobre la comercialización comercial de productos alimenticios para bebés para proteger la salud y el bienestar de las madres y las familias. 

“Esta nueva investigación destaca el enorme poder económico y político de las grandes empresas de leche de fórmula, así como los graves fracasos de las políticas públicas que impiden que millones de mujeres amamanten a sus hijos”, afirma el profesor Nigel Rollins, científico de la OMS y autor de un artículo sobre comercialización de leche de fórmula. Según la investigación explotan directamente las ansiedades de los padres en torno a los comportamientos normales de los bebés, lo que sugiere que los productos lácteos comerciales alivian la irritabilidad o el llanto, ayudan con los cólicos o prolongan el sueño nocturno.

 “La industria de la leche de fórmula utiliza ciencia deficiente para sugerir, con poca evidencia de respaldo, que sus productos son soluciones para la salud infantil común y los desafíos del desarrollo”, asegura Linda Richter, profesora de la Universidad de Witwatersrand, Sudáfrica. “Esta técnica de marketing viola claramente el Código de 1981, que dice que las etiquetas no deben idealizar el uso de fórmulas para vender más productos”.

La OMS y The Lancet denuncian que las ventas de leche de fórmula aumentan a pesar de que la alimentación con fórmula no ofrece los mismos beneficios de nutrición, salud y desarrollo que la lactancia materna. La comercialización intensiva de las fórmulas para lactantes continúa en gran medida sin cesar, y las ventas de estos productos se acercan ahora a los 55.000 millones de dólares estadounidenses al año.

"En este nuevo informe, autores de la Organización Mundial de la Salud y de organizaciones académicas y no gubernamentales de todo el mundo ponen de manifiesto la desinformación dirigida a las familias por la industria de los preparados para lactantes, así como el poder político, social y cultural de esta industria para remodelar la toma de decisiones de los padres con el fin de aumentar las ventas. El marketing de la leche de fórmula puede ser muy destructivo para la humanidad, porque su éxito depende de debilitar el vínculo entre la madre y el bebé para socavar la lactancia materna", asegura Robert Boyle, catedrático de Alergología Pediátrica del Imperial College de Londres, en declaraciones a Science Media Centre España.    

Quien no llora no mama

Para reivindicar que se regule el derecho a la lactancia en lugares públicos, en la plaza del Museo Reina Sofía, a finales de enero de 2023, en Madrid se hizo esta instalación de Cristina Iglesias llamada Quien no llora no mama. El objetivo de esta iniciativa diseñada por la organización sin ánimo de lucro teta & teta es instar al gobierno de España a que regule el derecho a la lactancia natural en espacios públicos ya que ninguna ley lo proteja. Según un estudio reciente citado por Europa Press, más de la mitad de las madres se han sentido juzgadas cuando han dado el pecho en público.

Lobby con argumentos antifeministas

La investigación de The Lancet llama la atención sobre el poder de la industria de las fórmulas lácteas para influir en las decisiones políticas nacionales e interferir con los procesos normativos nacionales e internacionales

Los autores describen cómo la industria de la leche de fórmula enmarca la promoción de la lactancia materna como un juicio moralista que es antifeminista y dañino para las mujeres, al tiempo que presenta la fórmula de leche como una solución conveniente y empoderadora para las madres que trabajan. 

En este sentido la nuevas formas de publicidad digital ha permitido que las diferencias entre la publicidad y los consejos sobre nutrición y cuidado estén difusos, especialmente a través de influencers y apps para padres patrocinadas por la industria con servicios de chat las 24 horas, los 7 días de la semana que permiten la colocación de productos, ofrecen muestras u ofertas gratuitas y promocionan en línea.