Tras episodios como los del coronavirus o la viruela del mono, la preocupación sobre los virus que llegan a España se ha intensificado. El virus del Nilo Occidental llega hasta Barcelona con el primer posible caso detectado en una mujer de 76 años. La paciente, que reside en El Prat de Llobregat, fue ingresada en estado grave en Hospital de Bellvitge y posteriormente pasó a la UCI. Actualmente se encuentra "en proceso de recuperación", ya que su salud es aún delicada. 

Se trata de una enfermedad infecciosa que se transmite a través de mosquitos a personas y animales, causando la Fiebre del Nilo Occidental. Actualmente se encuentra en expansión en España, sobre todo en Andalucía, tras la detección de un aumento de los mosquitos transmisores del virus en las zonas de Barbate y Vejer de la Frontera (Cádiz).

Ciclo de transmisión de la Fiebre del Nilo Occidental / Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación | Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

En el caso de Barcelona, el caso todavía está declarado oficialmente como "probable" por "la dificultad de realizar el diagnóstico definitivo", según indican las fuentes de la Conselleria a Europa Press. Esto se debe a que no es fácil hacer el diagnóstico porque las PCR pueden ofrecer un resultado negativo cuando la persona lleva tiempo infectada. 

Mientras tanto, el departamento de Salud aseguró que “se ha alertado a todos los centros asistenciales, tanto de primaria como hospitalarios, para estar alerta para detectar nuevos posibles casos”. Además, se puso en marcha el cribado del virus en todas las donaciones de sangre de Catalunya para evitar que puedan transmitir la infección.

La mayoría de los infectados no presentan síntomas

En septiembre de 2022 se diagnosticaron en Cataluña otros dos casos en Reus, que no tenían relación entre ellos. En caso de confirmarse el diagnóstico en Bellvitge, la comunidad suma un total de tres casos de virus del Nilo Occidental que se dieron a conocer. Sin embargo, la cifra real de infecciones podría ser mucho mayor, ya que no siempre se diagnostican.

“La mayoría de las personas infectadas por el virus del Nilo Occidental (70-80 %) no presentan síntomas”, explica Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). En el 20% restante puede llegar a causar fiebre, dolor de cabeza, dolor en el cuerpo, dolor en las articulaciones, vómitos, diarrea o sarpullido. 

A pesar de ser un escenario menos común, en los casos más graves, el virus infecta al sistema nervioso y puede ser mortal o dejar secuelas graves. Sin embargo, estos casos se suelen dar en una de cada cien infecciones (o uno de cada veinte casos con fiebre).

9 casos en España en 2023, aunque la cifra real podría ser mucho más alta

En lo que llevamos de 2023, ya se han detectado nueve casos de virus del Nilo Occidental en España. Cinco de ellos tuvieron lugar en provincias afectadas durante veranos anteriores, es decir, cuatro en Badajoz y uno en Sevilla. Se diagnosticó otro en Huelva, que causó el fallecimiento de una mujer de 84 años. Finalmente, dos se registraron en Valencia y este último en Barcelona. 

“Es necesario destacar la importancia de la cuenca mediterránea como ruta de las aves migratorias, especialmente las acuáticas, sin olvidar las islas Baleares, que actúan como punto de descanso para muchas aves. Además, de forma más específica, tanto Doñana como el Delta del Ebro son 2 emplazamientos muy significativos como punto de parada de las aves”, explica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en su programa de vigilancia de la infección. 

Por su lado, cada vez más países se dedican a estudiar a insectos que transmiten estas infecciones. Por ejemplo, Bill Gates abrió una enorme granja de mosquitos en Medellín (Colombia) para luchar contra las enfermedades como el dengue, Zika y fiebre amarilla.